La campaña de Empleo, suspendida por la Junta Electoral por descarada e ilegal, debía desarrollarse durante siete semanas, es decir, hasta el límite mismo de las elecciones del 27 de mayo. Pero ahora la pregunta razonable es: ¿cobrará la empresa adjudicataria todo el importe, 210.000 euros, aunque la campaña haya sido suspendida por Mamé