Empieza a reponerse la lógica en el escrutinio de la mesa de San Isidro, en Gáldar, donde un acta mal cumplimentada hizo que saltaran cien votos de una casilla a otra, de modo que el PP ganara la mayoría absoluta a costa de un concejal del PSOE. Ya apareció el tercer sobre, ese que se manda a la Junta Electoral de Zona para casos extremos como éste. En ese sobre, efectivamente, están los votos bien adjudicados, quizás porque el que rellenó el papelito de marras no se quiso equivocar de casilla, y líbrenos el cielo de querer pensar mal de los que cumplimentaron los otros dos. El caso es que todos los miembros de la mesa tendrán que ir a declarar al juzgado cuando se vea el recurso socialista y explicar cómo es posible que bailen cien votos con tanta facilidad. Ya el alcalde de Gáldar ha recibido información muy concreta de lo que le pasó a la presidenta de la mesa. A ver cómo la administra. La información, decimos.