Han tenido siempre toda la razón los miembros de la plataforma contra el Plan General de Santa Cruz, documento manifiestamente mejorable que por momentos ha colocado las viviendas de miles de ciudadanos en una situación jurídica insoportable. Y gracias a su lucha y a su constancia, algunos medios de comunicación y algunos partidos políticos les han respaldado en sus reclamaciones. Uno de esos medios es este, como podemos demostrar con la hemeroteca en la mano. Y uno de esos partidos ha sido el PSOE, que no solamente votó en contra del Plan General cuando lo aprobaron en comantida Coalición Canaria, el CCN y el Partido Popular. El PSOE, además, logró frenar la semana pasada la aprobación del documento en la Cotmac, y ha conseguido hacerse con el control de la Concejalía de Urbanismo y con el respaldo de su socio nacionalista para hacer las modificaciones necesarias para resolver el problema del llamado “fuera de ordenación”. Sin embargo, ninguno de estos hechos contrastables, ninguna de las sensaciones novedosas han bastado a los fanáticos, que cargan y cargan contra todos reclamando, ¡lo que faltaba!, que en Santa Cruz de Tenerife gobierne el PP en un pacto con los socialistas. No cabe mayor estulticia, mayor grado de iniquidad que la que está representando el abogado Felipe Campos en su irracional fanatismo.