La cosa tendrá solución inmediata, seguro, sobre todo conociendo a Ángel Marrero, presidente de Vanyera. El hombre tiene un problema con los olores, no los suyos particulares de él, que nos consta que son de marca, sino con los que expide su finca de Tejeda, municipio del que es natural. Según los vecinos, que han recogido 213 firmas que han entregado en el Ayuntamiento, la finca de Marrero despide unos malos olores que los afectados consideran insoportables. Son aromas provenientes de los animales que el empresario y vicepresidente de la UD cría en esa finca para suministro de su empresa. Algún empleado se debe haber despistado. Miren a ver.