El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
El Hierro y un redactor de discursos para la tele por 58.000 euros
Quien a hierro mata, a hierro muere. Coalición Canaria empezó pateando gravemente al PSOE dejándolo descaradamente fuera del gobierno de Santa Cruz de Tenerife con el pretexto de que ambos partidos no sumaban lo suficiente para reeditar el pacto 2011-2015. Les faltaba un solo concejal y ni siquiera los nacionalistas intentaron buscarlo. Así dio comienzo este verano la legislatura menos prometedora de la historia reciente de Canarias, y los sucesos posteriores no hacen otra cosa que alimentar los peores presagios. La última escaramuza hay que situarla en la isla de El Hierro, donde el PSOE, molesto por lo que considera incumplimientos y desplantes del socio local de Coalición Canaria, la Agrupación Herreña Independiente (AHI), decidió este martes, Día del Pino, presentar una moción de censura contra la alcaldesa de La Frontera, Melissa Armas, la primera mujer que accedía a ese puesto, ya ven. Se veía venir. Y lo sabían desde hace meses José Miguel Barragán, secretario general de Coalición Canaria, y Narvay Quintero, hoy flamante consejero de Agricultura. Se lo advirtió en los pasillos del Parlamento el líder herreño del PSOE, Alpidio Armas: los incumplimientos en el Cabildo y en Valverde (capital de la isla, para quien no lo sepa) dejaban las manos libres al PSOE para actuar en La Frontera. Y Barragán, siempre tan pragmático y posibilista, le contestó, en presencia de Julio Cruz, secretario general del PSOE canario, que si se daban esas circunstancias podía proceder en consecuencia. Quintero guardó silencio. Era cierto que para entonces Belén Allende había hecho valer su criterio y su revancha: no quería acuerdos de ningún tipo con quien en 2011 le arrebató la presidencia del Cabildo, a la que había accedido provisionalmente como cabeza de la lista más votada. Y en un acuerdo que ahora querría para sí el mismísimo Fernando Clavijo, Allende pactó esta vez esa Corporación con Nueva Canarias. Al tiempo, la alcaldía de Valverde la alcanzaba Daniel Morales, de AHI, en un acuerdo con el PP, que obtuvo los mismos concejales que el PSOE, tres. Por lo tanto, la moción de censura anunciada este martes en La Frontera, en la que los socialistas (tres concejales) se harán con la alcaldía apoyados por Unión Frontera (tres concejales), mandando a AHI (tres concejales) a la oposición junto al PP (dos concejales), no es más que el reflejo del fracaso que han vuelto a ser los pactos en cascada. Habiendo dejado en la estacada al PSOE en El Hierro, Coalición Canaria no tiene ni una pizca de legitimidad política ni moral para exigir que se corrija esa censura ni para amenazar con grandes quebrantos al pacto regional. Salvo que lo que se busque sea otra cosa.
Le regalaban la alcaldía a los de UF
Que José Miguel Barragán, perfecto conocedor de la génesis de la moción de censura en La Frontera, se haya descolgado este martes con un comunicado victimista en el que lanza una severa advertencia al PSOE no tiene ni medio pase. Sabía que se cocía porque se debatió en la última mesa de seguimiento del pacto, y sabía también que era imposible reconducir la situación precisamente por los incumplimientos de los suyos (una vez más) en El Hierro. Tan conscientes eran los nacionalistas herreños de la penitencia que tenían que cumplir que, en un desesperado intento final, llegaron a ofrecer la alcaldía a los dirigentes de Unión Frontera, los firmantes de la censura junto al PSOE. Antes muertos que con el socio impuesto por las respectivas organizaciones regionales. Que con esos mimbres alguien pretenda hacer creer que el pacto regional se tambalea por lo ocurrido en La Frontera es que busca otra cosa. Y lo que empieza a buscar cada vez más desaforadamente Coalición Canaria es una ristra de ofensas que le permitan, en primer lugar, eclipsar las que ha proferido contra su socio desde el comienzo mismo de esta legislatura para, acto seguido, tener todas las coartadas del mundo para romper el acuerdo –ahora o en diciembre- y entregarse en cuerpo y alma al Partido Popular. Y, en segundo lugar, devolver al PSOE lo que ha considerado una abierta declaración de guerra: el anuncio de que entabla negociaciones con Nueva Canarias para formalizar una alianza electoral progresista con la que concurrir en las dos circunscripciones canarias a las Cortes Generales el próximo mes de diciembre. No es que CC quisiera trasladar a esas elecciones el actual pacto de gobierno regional, ni mucho menos. Más preferirían algunos dirigentes nacionalistas hacerlo con el PP si no fuera porque les costaría un desgaste imposible de asumir. Lo que ha hecho encender todas las alarmas –como venimos diciendo estos días- es el temor a que se pierda la única opción de representación nacional que le queda a CC, la diputada por Santa Cruz de Tenerife Ana Oramas, a lo que habría que añadir un mayor fortalecimiento de Nueva Canarias como clara alternativa nacionalista a los que han querido copar sin éxito todo ese espacio ideológico y comercial. Ya se han empezado a distribuir los prontuarios entre los dirigentes de CC para lanzar a los cuatro vientos mensajes desalentadores para los militantes de NC: ¡cuidado, que Román quiere entregarles a una potencia metropolitana para que pierdan la identdad canaria!, viene a ser el grito de guerra.
Siguen los nombramientos sandungueros
Mientras Coalición Canaria arma su discurso contra el PSOE, contra Nueva Canarias y contra todo el que pueda engordarle sus ansias de revolcarse con el Partido Popular, continúa esta nueva era gubernamental dándonos disgustos. El capricho de Ricardo Melchior de ser presidente de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife ha sido atendido por la nueva prefectura nacionalista como si de un fichaje estrella se tratara, como si el ex presidente del Cabildo estuviera todavía en edad de ocupar un puesto ejecutivo de esa envergadura en lugar de pasar a la reserva activa como cargo emérito de cualquier cosa. Y como para darle el gusto al hombre había que mover a Rodríguez Zaragoza, pues rianga, hacen a éste viceconsejero de Acción Exterior, una canonjía para que el perjudicado pueda viajar a su libre albedrío por el mundo y dedique un cuarto de hora al mes a ponerse de acuerdo con la flamante directora general de Relaciones Exteriores, con las mismas competencias estatutarias, que no es otra que la ex alcaldesa de Los Llanos de Aridane, Jesús María Armas Domínguez, que fuera apartada del cargo para el que inicialmente había sido designada (directora de la Agencia de Calidad Universitaria) por su manifiesta ilegalidad. Un cachondeo que podríamos complementar un poquito con la Dirección General de Emigración (también llamada al voto emigrante y al desvarío), o la Viceconsejería de Asuntos Económicos con la Unión Europea, de la que cuelgan las direcciones generales de Asuntos Económicos con la Unión Europea (y tiro porque me toca) y de Asuntos Económicos con África. Habrá territorios coincidentes entre la Dirección General de Telecomunicaciones y Nuevas Tecnologías, dependiente de la Consejería de Presidencia (PSOE) y la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información, con rango de dirección general (CC), por no hablar de lo divertido que puede resultar comprobar las acciones del comisionado de Inclusión Social y Lucha contra la Pobreza respecto de las que acometa la viceconsejera de Políticas Sociales y Vivienda, que a su vez tendrá a su cargo una Dirección General de Políticas Sociales. Por no imaginarnos el esfuerzo de coordinación que deben realizar, para no pisarse la manguera, los titulares de la Dirección General del Gabinete de la Vicepresidencia y la Dirección General de Coordinación y Apoyo Técnico a la Vicepresidencia. No vamos a insistir en que, mientras tanto, siguen sin nombrarse los viceconsejeros de Justicia y de Relaciones con el Parlamento porque a lo mejor nos llaman pesados.
58.000 euros para las comparecencias parlamentarias
Sin alejarnos demasiado del epicentro de este terremoto llamado regeneración democrática y nuevos tiempos en el Gobierno de Canarias, hemos de dirigirnos ahora a uno de sus entes públicos, la Radiotelevisión Canaria. Con la aprobación de una nueva ley llamada a servir como herramienta para su purificación, su brillo y esplendor, algunos creíamos que se iban a disipar las cacicadas y los derroches. Que después de las experiencias vividas en la experimentación de distintas fórmulas de gestión por fin se había dado con la piedra filosofal que permitiera poner esos dos medios públicos, una radio y una televisión estructurante de un territorio desestructurado, al servicio de la ciudadanía. Felicitamos a los que nunca se lo creyeron porque se han salido con la suya. El Consejo Rector de RTVC, órgano que ha sustituido al fenecido –casi por inanición- Consejo de Administración, decidió este lunes contratar a un periodista con el cometido concreto de prepararle al director general (ahora presidente), Santiago Negrín, sus comparecencias parlamentarias. El elegido no es otro que Paco Martín, famoso en el gremio y en los ambientes políticos por su escasa afición al trabajo y por ser un protegido de José Miguel Ruano. Y no necesariamente por ese orden, porque quizás por esa protección eterna el hombre ha aprendido a vivir como un rajá. Paco Martín ha presentado para optar en solitario a ese puesto un currículo brillante, nutrido precisamente por esa relación directa con el poder. Su último empleo ha sido el de director de Estrategia de Contactel, precisamente la empresa a la que Ruano otorgó el servicio de gestión del 1-1-2 canario durante su etapa como consejero de Presidencia, Justicia y Seguridad. Paco Martín cobrará la módica cantidad de 58.000 euros al año, un salario similar al del director de cadena de la Televisión Canaria, con la diferencia de que él tendrá que trabajar bien poquito. Porque tiene que ser un infortunio que a Santi Negrín lo hagan comparecer en el parlamento una vez cada cuatro meses, como obligaban al defenestrado Willy García los del PP. A García le asistía en esta tarea su jefa de gabinete, Candelaria Delgado, que sigue desempeñando esa misma tarea en la empresa, ahora descargada de esa enorme responsabilidad.
Águeda Montelongo, al banquillo
Este jueves comenzará en el Tribunal Superior de Justicia de Canarias el juicio contra la presidenta del PP de Fuerteventura, Águeda Montelongo, y otras dos personas más, por los sucesos que nutrieron el llamado caso Patronato. Por si no lo recuerdan, este asunto consistió en el pago con dinero del Patronato de Turismo de Fuerteventura de estancias, cuchipandas y coches de alquiler a determinados cargos regionales y nacionales del Partido Popular en la mentada isla mientras el organismo era responsabilidad de la señora Montelongo. Lo que se ha podido demostrar durante la investigación revela que para el pago de esas facturas, en el Patronato de Turismo se falsificaban documentos públicos y se suplantaban personalidades de modo que quedaran velados los nombres de los verdaderos beneficiados de la mamandurria. Entre éstos podemos destacar al ex secretario general del PP canario, Manuel Fernández, al que le pusieron un coche de alquiler a cargo del organismo cuando iba a un acto de su partido; o el actual secretario de Estado de Seguridad Social, Tomás Burgos, al que camuflaron como actriz de culebrones mexicanos para justificar que se le invitara a alojarse en un hotel de lujo con dinero público. Este asunto fue destapado por Canarias Ahora en una de sus exclusivas periodísticas, como lo fue el caso Grupo Europa –ya juzgado-, cuya génesis también localizamos en Fuerteventura. Consecuencia de esa historia, ya está en la cárcel y -sobre todo- fuera del Ayuntamiento de Telde, quien fuera su jefe de Urbanismo, José Luis Mena. Lo que automáticamente nos lleva a recordarles que gracias al apoyo de nuestros lectores nos hemos podido permitir estos y otros reportajes de investigación que terminaron en manos de los tribunales de justicia. Es una labor para la que le volvemos a reclamar su apoyo suscribiéndose a nuestro periódico en el enlace que pueden ver a continuación. Muchas gracias.
Sobre este blog
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