Es un valor indiscutible dentro de Coalición Canaria el consejero de Empleo e Industria del Gobierno, Jorge Rodríguez (el otro, el bueno). Dentro del partido se le tiene bien considerado, trabaja muchísimo por meterle un poco de ideología al potaje ese de siglas y de sensibilidades, y en su consejería es muy respetado por su empeño y su desempeño. Lo malo es que, al ser el único referente grancanario del invento, le toca al pobre cargar con el cementerio de no colocados del partido. Este miércoles tomó posesión del cargo de secretaria general técnica de su consejería Cristina de León, que viene rebotada de la consejería de Economía y Hacienda. Era una de las personas de confianza del ex interventor general, Jesús Velayo, que ya está colocado en el ITC, también dependiente de Industria. También tenemos localizada en esa consejería, en calidad de asesora, a la histórica Paula Monzón. Tranquilos, que no se nota nada.