La UD Las Palmas ya tiene entrenador, canario por más señas, y todos tan contentos porque, como reza el dicho de Ernesto El Capi Aparicio, “el mejor entrenador del mundo es de la Unión Deportiva”. Por tanto, enhorabuena y agárrese los machos, míster. Lo que no es tan de la UD es el método empleado, una vez más, para llevar a cabo el proceso de selección. Sabemos que el consejo de administración encomendó al director deportivo, José De la Rosa, la búsqueda del técnico, y sabemos que desde el primer día -desde el jueves-, el nombre de Juan Manuel Rodríguez ya estaba decidido. Sin embargo, volvió a haber paripé, al más puro estilo Towers: se llama a un par de entrenadores canarios (tipo Toni Cruz o Álvaro Pérez), se les comenta la posibilidad de entrenar y a ver quién es el guapo que dice que no hubo terna. Towers, sin embargo, tuvo la deferencia de telefonear a los tocados para comunicarles la decisión de no contar con ellos, cosa que ahora no ha ocurrido. Al contrario, hasta se han permitido criticar a Toni Cruz por fichar por el Universidad sin esperar acontecimientos (¿qué acontecimientos?).