Mientras desde las diferentes portavocías del Partido Popular se reproducen más alegrías periodísticas (ahora le ha tocado a Benito Codina decir a Paco Moreno que se presente a las elecciones, que es buen político), en la vida cotidiana, la del día a día, la pegada al suelo, continúan los movimientos peperos. Ocurre en muchos comités locales, pero hoy les acercamos lo que pasa en Teror, donde dicen que la hasta ahora portavoz municipal del PP, Lidia Guerra, ha decidido mandarse a mudar y meterse con armas y bagaje en Coalición Canaria. No parece que le haya hecho mucha gracia enterarse por radio macuto de que el candidato del PP a la alcaldía de la Villa Mariana no va a ser ella, sino un hombre con mucha ascendencia electoral, Antonio Manuel Ojeda, que por cierto, proviene de Independientes de Gran Canaria, el partido de Pedrero. Antonio Manuel Ojeda fue el último presidente de Utinsa hasta su fusión con Salcai, un hombre muy trabajador y perseverante en el que Cardona debe haber visto una buena inversión. No le vamos a decir que se ha equivocado porque no nos lo parece.