El cáncer se ha llevado este domingo a otra gran mujer. Dolores Campos-Herrero falleció tras luchar muchísimo contra esa enfermedad y sin perder nunca el apoyo de una legión de amigos y familiares que la respetan por muchas de sus cualidades. Acababa de enviar a sus allegados sus dos últimas creaciones, Ficciones menores, un librito de relatos cortos, y Una vida imaginada, un poemario que recoge, de modo quizás premonitorio, un gran número de epitafios. Fue sobre todo escritora, una sensible, cultísima y prolífica escritora, pero se ganó la vida como periodista, primero en Canarias7 y luego y principalmente en Televisión Española en Canarias, donde se atrincheran seguramente sus mejores amigos. Sus restos mortales están siendo velados por ellos y por sus familiares en el tanatorio del Hospital Doctor Negrín, de Las Palmas de Gran Canaria. A Lola Campos la recordaremos siempre.