Juanma Pardellas se hará cargo de la dirección del Diario de Avisos con un núcleo duro de tres periodistas que él mismo elegirá para acometer ese nuevo periódico que pretende hacer. Se ahorrará cualquier disgusto relacionado con una reducción de plantilla, ya decidida por el consejo de administración en aplicación de las generalizadas políticas de ajuste y austeridad que llevan a cabo todas las empresas periodísticas. Pardellas era el profesional que reunía las cualidades exigidas por la empresa editora y sus condiciones han sido aceptadas. Por cierto, si repasan esas cualidades encontrarán que la empresa exigía que los aspirantes no hubieran dejado rastros de corrupción o extorsión periodística, algo que suena extravagante pero que en determinados niveles de la atmósfera se ha convertido en habitual en esta sofocante profesión. Tanto que uno de los candidatables que telefoneó al Diario a ver si se acordaban de él se autodescartó de inmediato al escuchar esa condición inexcusable. Otros nombres que han estado sonando estas semanas jamás estuvieron en la mesa de negociaciones. Juan Galarza, presidente de la Asociación de la Prensa, fue descartado en primera instancia por sus múltiples ocupaciones y compromisos empresariales. Y el jefe de prensa de Zerolo, José David Santos, jamás estuvo en cartera, y si su nombre sonó fue porque pulsó con el gerente del Diario su reincorporación a la plantilla, de la que está en estos momentos en excedencia.