Continúa empeñado José Manuel Soria en engañar a sus jefes del PP en Madrid con afirmaciones solemnes, de ésas que él sabe pronunciar con el tono adecuado para que parezcan verosímiles. Les dice que no se preocupen por el caso del salmón, que demostrará su inocencia, que jamás ha permitido que nadie le pague sus vacaciones... Y añade que la denuncia está teledirigida por el PSOE, que el denunciante, Carlos Sosa, trabajó para ese partido. Cierto, lo hizo como jefe de prensa durante seis años, pero desde 2000 dirige este periódico con dedicación exclusiva. Más o menos lo mismo que hizo él en tiempos del ministro Carlos Solchaga, que lo tenía entre su equipo de economistas más cercano. Tan cercano que hasta Saavedra llegó a proponerle un día ser consejero de Industria del Gobierno creado en 1991. Habrá que ir buscando otros argumentos, que éste es agua de borrajas.