El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
Un trozo de Anfi Tauro, a subasta
Cualquier admirador del refranero tradicional español sacaría a colación en estos instantes aquel que viene a decir que “lo que mal anda, mal acaba”. La urbanización de lujo de Anfi Tauro, en el barranco de El Lechugal, término municipal de Mogán, Gran Canaria, empezó con muy mal pie. Era uno de los sueños más anhelados del empresario noruego ?fallecido en 2006 Björn Lyng, después de los éxitos cosechados con su modelo de multipropiedad en el barranco de La Verga, en el mismo término municipal. El sueño de Lyng era un resort inmenso, con hoteles de superlujo, villas exclusivas, un campo de golf diseñado por el americano más experto de todos los americanos y una marina rematando la desembocadura del barranco. Demasiado para engullirlo una sola boca empresarial, por lo que se asoció a un empresario muy penetrado en los negocios moganeros, Santiago Santana Cazorla. Fue Anfi Tauro lo que llevó a José Manuel Soria a sentarse dos veces delante de una juez a explicar sus estrechas relaciones con Björn Lyng mientras se tramitaban las autorizaciones para la urbanización y se le hacía un hueco en la moratoria turística. Y fueron esas gestiones las que sonrojaron a todos los canarios al conocer las conversaciones grabadas por la Policía en las que el empresario Santana Cazorla pedía al consejero de Medio Ambiente, Domingo Berriel, que apretara “los tosnillos a Faustino”, en referencia a Faustino García Márquez, jefe del servicio de Urbanismo de la consejería que ponía algunos reparos urbanísticos a aquella operación. Fue Faustino, seguramente, el único que aguantó el tirón, porque los 29 reparos que puso el Patronato de Turismo cuando lo presidía Juan José Cardona, que acabó luego de gerente del Grupo Santana Cazorla, se soslayaron con una facilidad absolutamente sorprendente. Pero no era esto lo que pretendíamos contarles, aunque viene bien rememorar los comienzos de la aventura para concluir, como dice el refrán, que lo que mal anda, mal acaba.
Sobre este blog
El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora