Continuamos analizando para ustedes la brillante gestión que realizó al frente de la Caja Insular de Ahorros de Canarias el hoy presidente de Canarias7, Juan Francisco García, que se permite ordenar a sus lacayos que escriban sobre la gestión de los demás en empresas de titularidad privada. En este segundo capítulo vamos a exponerles los resultados de dos informes que obran en poder de la entidad, uno emitido por Price Waterhouse Coopers y el otro por el auditor nombrado por insaculación por el Juzgado de Instrucción número 6 de Las Palmas de Gran Canaria, que investigó el asunto y que acabó dictando sobreseimiento tras la retirada de las acusaciones. En referencia a la venta del inmueble de Triana 110, una de las joyas de La Caja, por algo más de 1.100 millones de pesetas, Price llega a la misma aterradora conclusión a la que llegó el Banco de España: “se obtuvieron resultados inferiores a los que hubiera permitido la situación del mercado”. O sea, que produjo quebranto patrimonial a una entidad pública. Tócala otra vez, Paco.