La expresión “injustamente imputados” tiene mucha miga porque va dirigida a los jueces que tienen abiertas causas penales contra personas las que investiga por la comisión de posibles delitos. Si todo un presidente del Gobierno considera injustas esas situaciones procesales es que cree que jamás debieron admitirse a trámite ni la querella presentada por la Fiscalía Anticorrupción contra Miguel Zerolo por el escándalo de Las Teresitas ni la magistrada Margarita Varona debió jamás acceder a la petición del Ministerio Fiscal de abrir causa penal contra José Manuel Soria y, a continuación, ampliarla contra Manuel Fernández, ambos investigados-imputados en el caso salmón. Luego, debemos entender que el presidente del Gobierno da por seguro que estos cargos públicos son completamente inocentes, ya explicará por qué.