'El Potrillo' seduce a 15.000 almas con cantos al amor y a México
El cantante mexicano Alejandro Fernández, también conocido como El Potrillo, sedujo este miércoles a más de 15.000 personas en Las Palmas de Gran Canaria con un concierto en el que cantó al amor, a la mujer y a sus raíces durante más de dos horas en las que interpretó una treintena de temas.
El recital de Fernández, incluido en el tour Viento a Favor que desarrolla por España y con el que celebra 15 años de carrera, una fiesta que seguirá este viernes en Tenerife, el 31 de mayo en Murcia y el 1 de junio en Valencia, comenzó a la hora prevista y su aparición en el escenario fue recibida por una muchedumbre de féminas con teléfonos móviles con los que inmortalizaron la figura del galán mexicano.
A Manos Llenas respondió Fernández con su primer tema, con el que comenzó a desgranar un repertorio de baladas que el público coreó emocionado y siguiendo al pie de la letra cada una de las historias de encuentros y desencuentros amorosos, lo que agradeció El Potrillo, quien enseguida dijo sentirse como en casa disfrutando de “una noche mágica”.
Con Canta Corazón llegaron las flores del público al escenario, donde banderas de México arroparon al cantante, quien, vestido de riguroso negro, dejó constancia con sus gestos y movimientos de su atractiva masculinidad, lo que celebraron miles de entregadas seguidoras.
Alejando Fernández sorteó cantando la Amenaza de Lluvia que acompañó al concierto ofrecido en el Estadio de Gran Canaria y con Me dediqué a perderte y el bolero Abrázame se fundió, sólo sobre el escenario, en un telón de fondo dominado por las llamas al que dio paso la irrupción del coro de mariachis con la que empezó la fiesta mexicana.
Vestido de charro y con aire desafiante pese a su eterna sonrisa, el mexicano prosiguió con un repertorio de temas del folclore de su país natal, entre los que no faltaron Guadalajara, Jalisco, o México Lindo, que el público de Las Palmas de Gran Canaria siguió en pie y a viva voz, una “belleza” que Fernández agradeció recordando que lo único que alimenta a los cantantes es su cariño y sus aplausos.
El Potrillo dijo estar muy orgulloso de poder compartir sus raíces con un público de un lugar tan lejano a su país y continuó su recital con Mátala un tema que dedicó a los hombres para que sepan cómo se ha de tratar a las mujeres: Asfixiándolas con besos y dulzura y suministrándoles “una sobredosis de ternura” porque “no hay ninguna que pueda resistirse a estos detalles”.
Con Si nos dejan, El Rey, Ya me di cuenta, Nube Viajera y Mujeres, tema en el que dibujó con picardía la silueta femenina y aseguró que “no hay en el mundo un varón que por amor a una mujer no haya llorado”, Alejandro Fernández acabó de meterse en el bolsillo a un auditorio plagado de féminas a las que, en algunos casos, se sumaron con tiernos arrumacos sus acompañantes masculinos.
