'Sangre Vieja', una novela fantástica que transcurre en diferentes épocas por la ciudad de La Laguna
Dice en su prólogo Jesús Palacios : “Sangre vieja no es una novela al uso. No es un ejercicio escapista complaciente, ni una lección social o moral. Es una indagación en lo posible de lo imposible y lo imposible de la existencia”.
Sangre Vieja, la novela de Jonathan Allen publicada este año por la editorial Mercurio, cuenta en sus 307 páginas cargadas de narrativa fantástica y de aventuras las vicisitudes de sus dos jóvenes protagonistas: Cristóbal, un médico tinerfeño y John, un banquero escocés.
Ambos personajes se conocen en el siglo XVIII viajando a Venecia y descubren que guardan el mismo secreto: Son seres inmortales.
Tras sufrir toda clase de exilios y pruebas, algunas destinadas a su expiación, logran regresar a sus respectivos domicilios en pleno siglo veintiuno, con la voluntad de rehacer sus vidas y crear una familia normal.
Pero dos siglos y medio de vida pasan una enorme factura. El médico reencuentra en el alma de la mujer que una vez amó en otro cuerpo, y el banquero se enamora de una joven jamaicana.
A partir de esta coyuntura la ilusión retorna a sus vidas, pero nada será fácil. En primer lugar, porque no saben cómo explicar su eterna juventud y los oscuros detalles de su supervivencia, en segundo, porque las jóvenes elegidas encarnan conflictos clásicos de interés socio-económico, y han tenido, a su vez, relaciones sentimentales traumáticas.
La narración transcurre en presente a través de un diario intercalado que cuenta las vidas pasadas de sus protagonistas que han transcurrido en Londres, Venecia, Praga y San Cristóbal de La Laguna.
Tanto John como Cristóbal, y todos los personajes contemporáneos, se comunican por carta o correo electrónico y también guardan diarios del acontecer cotidiano. Los mismos hechos y distintas opiniones se cruzan en un intercambio continuo de escrituras que se centran especialmente en los efectos causados por los misteriosos protagonistas.
Se crea una multiplicidad de voces que narran lo cotidiano y lo banal, lo increíble y lo inverosímil, la biología y la vida infinita, lo real y lo metafísico. Toda una serie de diálogos y discusiones que buscan el sentido de la existencia y los límites del bien, jalonan una línea narrativa general que también recurre a la objetividad.
Allen recurre a lo fantástico, con criaturas esotéricas, enanos, gigantes y soldados muertos, a modo de metáfora para recordar las luces del progreso y las sombras de la historia.
Sangre vieja no acaba en el presente, se adentra en el futuro. Su lectura requiere cierto esfuerzo, no por ninguna complejidad expresiva sino por el ritmo gradual y fragmentario de su desarrollo. Relato epistolar, diario de viaje y cuento sobrenatural, causa en el lector una sensación de vértigo y extrañeza que ahondan en el misterio de nuestra condición.
Canario y británico, Jonathan Allen nace en Las Palmas de Gran Canaria pero se educa en Inglaterra y, siendo bilingüe, se licencia en Filología Francesa en Cambridge. Profesor de la ULPGC de Francés, trabajó en el CAAM, es crítico de arte, colaborador de la prensa, director de publicaciones y se ha reinventado como novelista y narrador.
Entre sus últimos libros figuran Venecia & otros cuentos de amor y alcohol (Idea, 2011), 2 cuentos para Berto Herrera, con ilustraciones de Luis Arencibia, Napoleón en Santa Helena & otros cuentos (Huerga y Fierro, 2010) y Julia y la guillotina (Ediciones Aguere y Ediciones Idea, 2013).