Más de cuatro mil canarios montan su negocio con el dinero del paro
Más de 4.000 parados canarios han optado en tan solo cinco meses por solicitar el pago único de la prestación por desempleo para montar su propio negocio o incorporarse como socio en las filas de una cooperativa o de una sociedad laboral, según informa la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife en un comunicado de prensa.
Este número de emprendedores, que se han acogido a la fórmula del autoempleo beneficiándose del dinero del paro, es una cifra récord, ya que supone un aumentó, de enero a mayo, del 97,31%, en comparación con el mismo período de 2008, según el análisis del Servicio de Estudios de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Santa Cruz de Tenerife.
Elaborado con los datos aportados por fuentes del Ministerio de Trabajo e Inmigración, el informe refleja que de las solicitudes de pago único que se concedieron en España en los primeros cinco meses del año, 4.151 correspondieron a demandas de canarios desempleados que, ante la crudeza que ha adquirido el mercado laboral por cuenta ajena, optan por crear su propio puesto de trabajo.
A lo largo de todo 2008, el número de beneficiaros canarios del pago único ascendió a 5.049, una cifra que en 2009, y de seguir la tendencia registrada de enero a mayo, se podría haber alcanzado ya este verano a falta de conocer los datos finales del Ministerio.
Inversión o seguridad social
El informe de la Cámara de Comercio también recoge que del total de beneficiarios canarios, 4.048 se dio de alta como autónomo, mientras que 92 se decantaron por ser socios en sociedades laborales y 11 se integraron en cooperativas. La media del importe económico de las solicitudes en el Archipiélago ascendió a 2.131,52 euros, un dinero con el que están obligados a montar un negocio o actividad económica, bajo la pena de que si no lo hacen, deben reintegrar estos fondos.
El número de peticiones fue ligeramente mayor en la provincia de Las Palmas, 2.174 frente a las 1.977 de Santa Cruz de Tenerife. Sin embargo, mientras que en la provincia oriental los parados recibieron de media 2.029,75 euros, en las islas occidentales esta cantidad aumentó hasta los 2.243,44 euros.
De hecho, en el análisis del Servicio de Estudios de la Cámara de los datos proporcionados por fuentes del Ministerio de Trabajo, se aprecia que el importe medio que cobran los desempleados ha descendido de manera continuada desde 2001. En ese año, un parado que pidiese el pago único por la prestación por desempleo obtenía 10.617 euros. Siete años después, el importe cayó a los 3.693 de media en todo el país, cantidad que en Canarias, una de las comunidades con los sueldos más bajos, es aún inferior, y se situó en 3.399,65 euros. Cinco meses más tarde, la media se ha reducido en 1.268,13 euros, hasta los 2.131,52 euros, situación que se explica en parte por que estos parados disponen cada vez de menos días de cotización por paro.
Tabla de salvación
La crisis está diversificando la búsqueda de una oportunidad laboral hacia el autoempleo. De hecho, detrás del 65% de las empresas creadas en los últimos seis meses, se encuentra un ex desempleado, la mayoría con menos de un año en el paro. El 60% de los proyectos los crearon hombres, frente al 40% de mujeres.
Según la técnica del Departamento de Desarrollo Empresarial de la Cámara de Comercio, Mª Luisa Martín Martín, las altas tasas de desempleo que azotan al Archipiélago están provocando que los trabajadores que se han quedado sin empleo busquen información y asesoramiento para crear sus propias empresas y así hacer frente a la falta de trabajo que existe ahora mismo en Canarias. De hecho, en lo que va de año, el Servicio de Creación de Empresas ha incrementado de manera significativa el número de peticiones de asesoramiento. De enero a agosto, la Cámara ha atendido a cerca de 3.200 emprendedores.
Iniciativas frustradas
“Hay mucha más gente que se interesa pero eso no quiere decir que se traduzca en la creación de muchas empresas”, explica Mª Luisa. De momento hay muchas peticiones de datos por parte de parados “de todos los perfiles, sobre todo de la construcción y del sector comercial, actividades que están padeciendo especialmente el varapalo de la crisis.” Muchos de sus “trabajadores” deben decidirse por la opción de sacar adelante un negocio, relacionado o no con la actividad de la que proceden. En la mayoría de los casos hay un trasvase hacia el sector servicios.
Pero el autoempleo no es un refugio que siempre cuaja, muchas de las aspiraciones de los emprendedores se quedan a mitad de camino. De los 2.057 proyectos asesorados por la Cámara de Comercio en los primeros seis meses del año, tan sólo se han materializado 434 negocios, a los que hay que sumar otras 45 iniciativas empresariales que están a punto de consolidarse.
La fragilidad de los proyectos de negocio se explica, sobre todo en estos momentos, por las dificultades para acceder al crédito y por la percepción de muchos desempleados de que empezar una aventura empresarial en plena recesión es demasiado arriesgado.
El severo ajuste económico también ha cambiado el patrón del usuario del servicio de Creación de Empresas. Hasta 2007 eran sobre todo mujeres las que se interesaban en crear un negocio, planteado como una segunda fuente de ingreso a la economía familiar y siempre como una actividad secundaria. Sin embargo, el ascenso de la tasa de paro en Canarias ha modificado el perfil de los usuarios que acuden a la Cámara “Ahora son cada vez más hombres en situación de desempleo, un 54% frente a un 46% de mujeres, con estudios secundarios y con una edad comprendida entre los 25 y 45 años”, explica María Luisa Martín.
Pago único
Para fomentar el autoempleo entre los desempleados, el Consejo de Ministros aprobó el pasado 31 de julio varias medidas que estarán vigentes hasta finales de 2010. Una de ellas es el aumento al 80% del porcentaje de la prestación de paro que los parados pueden capitalizar para invertir en un negocio si tienen menos de 30 años (35 años para las mujeres).
Actualmente los desempleados pueden destinar el 60% de esta prestación para su correspondiente inversión, mientras que el resto del importe sirve para financiar los costes de la Seguridad Social. Junto a esta modificación, en dicho Consejo también se decidió eliminar la limitación de hasta dos años que tenían los asalariados para optar a ser socios trabajadores de las cooperativas y sociedades laborales.
En definitiva, la capitalización o pago único de la prestación por desempleo es una medida de fomento de empleo como ayuda en las iniciativas de autoempleo, bien facilitando el desembolso necesario para el inicio de actividad o subvencionando las cuotas de la Seguridad Social durante el desarrollo de la actividad.