La patronal de Tenerife estima que la subida del salario mínimo destruirá entre 3.000 y 12.000 empleos en Canarias
Según pronostico la CEOE de Tenerife, la subida del Salario Mínimo Interprofesional podría tener un impacto negativo en el mercado laboral canario estimado en una pérdida de entre 3.000 y 12.000 empleos. Según la patronal tinerfeña, que presentó este viernes un informe de coyuntura económica, el incremento previsto del salario mínimo reúne todos los requisitos para que el impacto negativo sobre el empleo sea elevado y varios organismos han calculado su impacto para España entre los 40.000 empleos destruidos (AIREF) y los 150.000 (Banco de España), con la Comisión Europea en un término medio (70.000).
Teniendo en cuenta que los trabajadores afectados en Canarias son sensiblemente superiores a la media nacional, estas estimaciones aplicadas a las islas implicarían esa destrucción estimada de entre 3.000 y 12.000 empleos como resultado del aumento previsto del salario mínimo. Pero las estimaciones de estos organismos no se han realizado teniendo en cuenta un crecimiento del 1,2% para 2019, como se prevé para la economía canaria, sino uno superior, por lo que cabe esperar que el impacto esté en el rango alto de esas estimaciones o incluso sea superior, advierten desde la patronal.
En cuanto a las previsiones macroeconómicas, la economía canaria crecerá un 2,2% en 2018, siete décimas menos que en 2017, y un 1,2% en 2019, un punto porcentual menos que en 2018. Asimismo, el turismo y el consumo interno cambian de tendencia y caen o se estancan. Por primera vez, el sector turístico se comportará en Canarias peor que el resto de la economía y detraerá potencial de crecimiento al PIB, y la recuperación de turistas en Turquía y Egipto está lejos de haber concluido y continuará durante 2019.
Ningún otro sector toma el relevo de tractor del crecimiento. Ni la construcción, lastrada por los problemas regulatorios para la edificación de vivienda nueva, ni el sector público, cuya inversión apenas crece pese a disfrutar de los presupuestos más elevados de la historia. A todo esto hay que sumar que en el año 2019 no se producirá creación de empleo en Canarias, medido en términos interanuales, y que el aumento previsto del salario mínimo anunciado por el Gobierno implicaría una destrucción estimada de entre 3.000 y 12.000 empleos en las islas.
Éstas son algunas de las conclusiones que se extraen del 'Informe de coyuntura económica del tercer trimestre de 2018 y las previsiones para los próximos meses', que ha sido presentado este viernes por el presidente de la Confederación Provincial de Empresarios (CEOE-Tenerife), José Carlos Francisco, que ha estado acompañado por José Alberto León, de Corporación 5; Héctor Hernández, director de Zona de Cajamar; y María Hernández, directora de Oficina de Cajamar.
Según se desprende del informe, durante 2019 la economía canaria continuará creciendo debido a la inercia de los pasados años, pero ni el turismo ni el consumo privado actuarán de impulsor del crecimiento como venían haciendo hasta la fecha. El único sector capacitado para relevar de alguna manera al turismo y el consumo y liderar el crecimiento de la economía sería el de la construcción, la gran damnificada de la recesión, pero se ve incapacitada para hacerlo, por un lado, por los problemas regulatorios para la edificación de vivienda nueva, lo que está ocasionando un déficit, estimado en 40.000 viviendas en un reciente estudio de Corporación 5, déficit que puede convertirse en crónico e incluso agravarse si no se toman medidas urgentes para reactivar la vivienda residencial, tanto pública como privada.
El pasado año se concedieron licencias para unas 1.500 nuevas viviendas, y unas 600 durante los cinco primeros meses de 2018, lo que supone un ritmo similar al del año anterior. Para CEOE-Tenerife, esta cifra resulta claramente insuficiente para la demanda existente, y más cuando la población creció en casi 19.000 personas a lo largo de 2017.
Desde la patronal advierten de que tampoco cabe esperar que la inversión pública impulse la economía, ya que los gastos de capital (inversiones reales y transferencias de capital) apenas crecen en 63 millones de euros (un 6,3%), hasta los 1.078 millones de euros, en el Proyecto de Presupuestos de la Comunidad Autónoma de Canarias para 2019; una cifra que sigue estando por debajo del nivel de inversiones previo a la crisis, y todo ello a pesar de que se trata del mayor presupuesto de la historia, creciendo en 760 millones de euros (6,8% de aumento).
Influencia exterior
El entorno exterior tampoco ayuda, tal y como recoge el informe, pues a los problemas específicos europeos (Brexit y presupuesto italiano) se añade el débil crecimiento de su economía debido al estancamiento de Italia y al negativo tercer trimestre de la economía alemana, y el contexto económico mundial, marcado por una incipiente guerra comercial que parece destinada a recrudecerse.
En cualquier caso, estas estimaciones se han realizado asumiendo que el Parlamento Británico aprobará el Brexit acordado con la Unión Europea. En caso de Brexit desordenado y sin acuerdo, que depreciaría la libra y encarecería los viajes al exterior de los turistas británicos, además de las posibles complicaciones para los desplazamientos y el tráfico aéreo, las previsiones de crecimiento de la economía canaria se reducirían aún más, avisa la patronal.
A estos hechos se añade la parálisis legislativa que sufre España desde 2015 en las necesarias reformas económicas, e incluso para cumplir con los plazos de aprobación de las cuentas del Estado, tanto en lo que respecta a los Presupuestos de 2018 como, previsiblemente, en los de 2019.
Igualmente, el clima para el desarrollo de actividades económicas ha empeorado sustancialmente, debido a los frecuentes anuncios de aumento de impuestos y límites y restricciones a numerosos sectores (automóvil, gasoil, VTC, alquiler, banca, comercio electrónico, transacciones financieras, etcétera). Así, para CEOE-Tenerife no resulta extraño que el Índice de Confianza Empresarial caiga en 1,7 puntos porcentuales para el último trimestre del año respecto al anterior.
Previsiones de empleo
La Confederación Provincial de Empresarios estima en 2018 una creación neta de 48.000 empleos, medidos según la Encuesta de Población Activa, o unos 25.000 nuevos afiliados a la Seguridad Social, una estadística que considera más fiable y una cifra que estaría en línea con sus previsiones; sin embargo, conforme a la ralentización económica expuesta y a otros factores, la patronal estima que en el año 2019 no se producirá creación de empleo, medido en términos interanuales. Este hecho, unido al previsible crecimiento de la población activa, ya que la población residente en Canarias no deja de crecer, supondrá que la tasa de desempleo volverá a superar de nuevo el 20% a finales de año.
A la acelerada desaceleración económica prevista se une además el impacto negativo sobre el empleo del anunciado incremento del salario mínimo hasta los 900 euros, anunciado por el Gobierno. Según CEOE-Tenerife, una subida del salario mínimo tiene efectos positivos (incremento en la renta de los trabajadores afectados que conserven su empleo) y también efectos negativos (empleos que se destruyen o no llegan a crearse al ser su productividad inferior al nuevo coste laboral). La bibliografía es concluyente al afirmar que la destrucción de empleo es mayor cuando la economía se desacelera, el incremento del salario mínimo es elevado, el porcentaje de trabajadores afectado es elevado, la productividad es reducida, y las tasas de desempleo juvenil y de larga duración son elevadas.
Según la Confederación, en el caso canario se cumplen con todos los condicionantes para que el impacto sea negativo. Así, el crecimiento de la economía canaria se reducirá del 2,2% en 2018 al 1,2% en 2019. El incremento del salario mínimo es el mayor de la historia en un solo año (22%); el porcentaje de trabajadores a los que afectará es el mayor de toda España (en torno al 13%); la productividad nominal por hora trabajada lleva estancada en Canarias desde el año 2013; la tasa de desempleo juvenil en Canarias es del 37,5%, y el 52,6% de los desempleados son de larga duración (más de un año desempleado).