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Inma Évora: “Quiero ser alcaldesa para priorizar a las personas, no a los bancos”

La activista social y portavoz de la PAH en Tenerife, Inma Évora, es candidata para la capital tinerfeña con Participa Santa Cruz.

Belén Molina

Santa Cruz de Tenerife —

Inma Évora es una de las activistas sociales más conocidas en Tenerife. Desde luego, la conocen bien en el Ayuntamiento de la capital tinerfeña y en las entidades bancarias, y la conocen aún mejor los cientos de familias a los que ha logrado paralizar el desahucio de sus viviendas hasta lograrles una alternativa ocupacional con alquileres sociales, o que las pudieran entregar como dación en pago.

Procedente del mundo de la restauración y la pintura, Inma Évora (45 años. El Aaiún) se metió de lleno en la lucha social y la denuncia pública siguiendo el ejemplo de su madre. Después de seis años al frente de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) en Tenerife, Évora se ha animado a dar el salto a la política y aspira a ser alcaldesa de Santa Cruz de Tenerife con Participa Santa Cruz, proyecto nacido en 2011 a raíz del 15-M y que es una alternativa que pretende, según sus propias palabras, “priorizar a las personas, no a los bancos. Buscamos una regeneración desde dentro”.

Ha sido una candidatura complicada, reconoce. “Nosotros llevamos un proceso de confluencia. Participa no es un partido al uso, sino un proyecto ciudadano que lleva más de ocho meses caminando. Empezó como Ganemos, el mismo Ganemos de Ada Colau, pero tuvimos dificultades para que determinados grupos comprendieran cuál es el momento histórico real que estamos viviendo, que es el de la ciudadanía, no el de las siglas”.

“No podemos seguir jugando con las mismas reglas. Queremos cambiarlas. Y para ello contamos con un equipo de personas muy preparadas, que vienen de movimientos vecinales, sí, pero que son profesionales de la sanidad, la educación, la cultura, la economía, el urbanismo, y hasta de la Administración Pública, con capacidad de gestión, muy conocedores y trabajadores de las necesidades sociales”.

Políticas sociales, y entre ellas viviendas, guarderías, centros de día para mayores y dependientes, y garantizar los servicios básicos (agua y luz) a las familias necesitadas están entre los objetivos a corto y medio plazo.

“Nuestro programa prioriza a las personas. Para eso quiero ser alcaldesa, pero tenemos los pies en la tierra y no vamos a vender humo. Hasta que no estemos dentro del Ayuntamiento no sabremos cómo se distribuyen las partidas sociales, ni a dónde va el dinero para ayudas que no se conceden porque muchos santacruceros ni siquiera saben que existen, como son ayudas para gafas, para dentista, para la compra de muebles, de electrodomésticos… ¿A dónde va el presupuesto destinado a esa partida?”

Por eso, asevera, lo primero que intentaría es remodelar el Instituto Municipal de Atención Social (IMAS).

Cargos que sobran

“Creemos que en el IMAS hay cargos políticos que deberían desaparecer y dedicar sus sueldos a contratar personal para elaborar los expedientes de los solicitantes de ayudas y para que se tramiten, sin dilaciones, las Prestaciones Canarias de Inserción, las PCI. En Santa Cruz de Tenerife no hay nadie contratado para esa labor. Eso da cuenta de lo mucho que les importan las PCI al actual alcalde Bermúdez y a todo su grupo de Gobierno local”, sostiene.

E insiste: “¿Cómo es que se acaban las partidas para ayudas sociales y para la PCI? Si las personas fuesen una prioridad no deberían acabarse, pero priman los intereses especulativos antes que nuestros vecinos”.

Inma Évora es una mujer de carácter fuerte. De no ser así no habría hecho una colecta de céntimos para pagar las dos mensualidades de la hipoteca de un matrimonio joven que, de golpe, se vio sin ingresos y con una hija de pocos años. “Hemos tenido que hacer denuncia pública para que un problema que era desconocido se conociera. Le hemos puesto cara, nombres y apellidos a los dramas que a diario viven quienes se ven sin casa y con una deuda pendiente en el banco”.

Sin embargo, los políticos veteranos le echan en cara, a ella y a otros nuevos políticos en el escenario, la falta de experiencia en la gestión de la cosa pública. En cuanto a que no son corruptos, no son pocos los ciudadanos de a pie que aseguran que en cuanto toquen el poder, lo serán.

“Empiezo por lo segundo: ¿quién le ha dicho a usted que no me han intentado corromper ya? Me han intentado comprar, y no una, sino muchas veces, y por grandes partidos. Y he dicho que no. Me han ofrecido dinero, pero sigo siendo la misma mujer con una menor a su cargo y dificultades para llegar a fin de mes”, asegura. “Así que no, no temo malearme si algún día llego al poder”.

“En cuanto a lo primero, a la falta de experiencia, baste decir que la precariedad que vivimos es fruto de la mala gestión política de los que están ahora y quieren volver a estar, y que no son quiénes para criticar, ni poner en tela de juicio, nuestra capacidad de gestión después de la gestión tan pésima que han llevado a cabo”.

Y añade: “Casi todos los partidos conocidos llevan en su programa medidas para acabar con los desahucios, pero esas medidas han sido elaboradas desde la Plataforma de Afectados por las Hipotecas, que es un movimiento social. Lo mismo ocurre con iniciativas vecinales, como es el paseo hasta Las Teresitas. Son muchas las propuestas de movimientos sociales que han hecho suyas tanto el PP, como CC, PSOE y hasta IU. Así que experiencia en aportar soluciones sí que tenemos”.

“Además, confiamos totalmente en los técnicos y funcionarios municipales, profesionales a los que no se puede poner en duda su conocimiento en gestión municipal. Esos trabajadores y trabajadoras se quedan, son los políticos los que se marchan. Y son esos trabajadores quiénes podrán indicarnos la mejor manera de llevar a cabo nuestras propuestas, las viables a corto plazo y las que necesitarán más tiempo. Con total transparencia, de forma que los santacruceros y las santacruceras puedan saber a dónde se destina cada céntimo de lo que entra en impuestos, por Cabildo, por Gobierno de Canarias y por subvenciones europeas”.

Propuestas concretas

En lo concreto, la vivienda es una prioridad de Participa Santa Cruz. “Hay que hacer un censo real de todos los inmuebles que son propiedad del Ayuntamiento, incluso los que figuran como locales y se están dejando caer, y desde luego, parar los desahucios, porque en Canarias hay un desahucio cada dos horas, y la mayoría se dan en Las Palmas de Gran Canaria y en Santa Cruz de Tenerife”.

Así que, según afirma Inma Évora, no es cierto que Santa Cruz de Tenerife sea una ciudad libre de desahucios, en contra de lo que pregona el todavía alcalde. “La semana pasada paramos varios desahucios desde la PAH. Es cierto que se ha hecho más que en otros ayuntamientos, pero no hay una respuesta institucional inmediata ante estos casos urgentes. Es más, no deberían darse casos urgentes si hay respuesta institucional”.

Tras la vivienda, el segundo objetivo es garantizar servicios básicos, como el agua, “algo que ya hemos conseguido para muchas familias desde la PAH. Hay directrices europeas que no permiten que una familia, una persona, no pueda acceder al agua”.

En cuanto a Emmasa, la candidata a alcaldesa no tiene dudas: “Pública por supuesto. Da pérdidas, así que por pura lógica, que vuelva a ser pública, que daba beneficios. Ya sé que el alcalde dice que rescindir el contrato puede conllevar indemnizaciones millonarias, pero tenemos juristas que dicen que se puede rescindir el contrato sin penalizaciones”.

Igual de claro lo tiene en cuanto al llamado Mamotreto: “No cabe legalizarlo en un plan especial. La sentencia es firme y dice lo que dice, que hay que derribarlo. Y aunque no nos sobra el dinero para abogados, estamos estudiando personarnos como acción popular en el caso Las Teresitas”.

También propone “que los vecinos puedan desarrollar algunos proyectos de infraestructuras de los barrios. Usar la mano de obra de parados para restaurar el Viera y Clavijo y que vuelva a ser el centro cultural que era. Y activar toda la ciudad, porque Santa Cruz es un muermo. Se dinamizan una o dos zonas, en el centro, y del resto, nada. Lo negocios se van a pique y las casas se caen en Ofra, en la Salud, en La Cuesta…”

Y otro objetivo, a medio plazo: “Es necesario incentivar la vida cultural, porque se la han cargado. Tenemos artistas muy valiosos en el campo de los audiovisuales, de las nuevas tecnologías, y eso genera empleo, pero para ello hay que ver un poco más allá de lo que siempre hemos visto y salirnos de lo que siempre hemos conocido”.

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