El hombre que agredió a Berlusconi había ingresado en un hospital en cinco o seis ocasiones
ROMA, 14 (EUROPA PRESS/ Gloria Moreno)
Massimo Tartaglia, el hombre de 42 años que este domingo por la tarde agredió en la cara al primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, presentaba desequilibrios mentales y había tenido que recibir tratamiento en un hospital de día en cinco o seis ocasiones.
El agresor recibió atención médica en el Hospital Policlínico de Milán hasta el año 2003. Después se dirigió a una doctora que trabaja para un ente ligado a este mismo hospital y a la que visitaba de vez en cuando.
La facultativa está ahora preparando un informe detallado sobre las condiciones de salud de su paciente y los problemas mentales que sufre, aunque, el de este domingo fue el primer episodio de agresión cometido por Tartaglia.
El hombre no tenía antecedentes penales y sus familiares aseguraron que en el pasado no había llevado a cabo ningún acto similar. Sí confirmaron, en cambio, que se hallaba bajo tratamiento psiquiátrico desde hacía tiempo.
Tartaglia trabaja en la empresa de su padre y aparentemente llevaba una vida normal, según explicaron algunos de sus vecinos a los medios de comunicación italianos.
El agresor, que fue detenido inmediatamente después del ataque, fue trasladado a la cárcel de San Vittore, acusado de lesiones agravadas por premeditación y por la condición pública de la parte ofendida.
Según los medios locales, Tartaglia habría justificado su acción con motivos políticos al discrepar con las ideas de Berlusconi. En el momento de la agresión, llevaba escondidos en una bolsa un objeto contundente de 20 centímetros de largo, un encendedor de grandes proporciones, un crucifijo de 30 centímetros y otra figurilla de cuarzo.