Israel dice que los activistas trataron de secuestrar a tres soldados
Los activistas de la flotilla solidaria que viajaban a bordo del Mavi Marmara “trataron de secuestrar” a tres efectivos de los comandos de élite que asaltaron el navío el pasado lunes, motivo por el cual los oficiales al mando habrían dado la orden de abrir fuego. Ésa es la versión que dio este viernes el diario Haaretz citando el contenido de las investigaciones preliminares abiertas por la Armada israelí.
Tres de los primeros soldados que descendieron de los helicópteros utilizados por las fuerzas hebreas habrían perdido el conocimiento después de ser golpeados por los activistas para posteriormente ser trasladados a una sala situada bajo la cubierta del barco. Después de que decenas de soldados consiguieran adentrarse en el interior del navío los tres efectivos que fueron supuestamente secuestrados recobraron el conocimiento y se unieron a sus compañeros, según el rotativo israelí.
El asalto, que se produjo en aguas internacionales y causó la muerte de al menos nueve activistas, ha sido considerado como un acto de piratería por gran parte de la comunidad internacional y como un gran fracaso por la opinión pública israelí. La Armada de Israel ha negado las acusaciones que apuntan a una mala planificación del operativo e insiste en que los incidentes violentos se desataron después de que los activistas atacaran a los comandos de élite desplegados.
La operación para detener a la Flotilla de la Libertad, que pretendía romper el bloqueo marítimo que mantiene Israel desde hace tres años sobre la Franja de Gaza para trasladar decenas de toneladas de ayuda humanitaria a la población gazací, comenzó alrededor de las 04.30 horas, señalan las investigaciones preliminares de la Armada hebrea.
Activistas “incondicionales”
Debido a presencia de “activistas incondicionales”, entre ellos miembros de IHH -organización turca que organizó la expedición humanitaria-, la atención se centró en el Mavi Marmara, indica Haaretz, citando siempre los informes de la Armada y añadiendo que el jefe de las fuerzas navales, Eliezer Meron, así como el director de las tropas de élite de la Armada, teniente coronel A., siguieron el operativo desde un barco de guerra cercano e incluso llegaron a subir al navío turco.
“Como se ve en los vídeos tomados durante el asalto, los primeros cuatro soldados en descender fueron atacados con palos, hachas y cuchillos”, indica el diario. Uno de ellos, K., “vio a su jefe de equipo en la cubierta y cómo un activista turco le apuntaba en la cabeza con la pistola que le había arrebatado”. En ese momento, K. descendió de la cuerda y disparó al activista que tenía la pistola. “Eso sucedió apenas veinte segundos después de que el primer soldado aterrizara sobre la cubierta”, añade.
El resto de efectivos “eran golpeados por los activistas según aterrizaban”. A los seis minutos de haber comenzado la operación, más tropas de élite comenzaron a descender de un segundo helicóptero con un comandante a bordo, y es entonces “cuando se dieron cuenta de que tres compañeros habían desaparecido, por lo que empezaron a buscarles”.
Intercambio de disparos
Apoyados ya por las tropas que descendían de un tercer helicóptero, y con el jefe de las unidad de élite de la Armada en la cubierta del barco, fue cuando se produjeron “intercambios limitados de disparos” en el puente de mando y en el interior de barco, momento en el que se pudieron recuperar a los tres hombres que supuestamente habían sido secuestrados.
Dos minutos después de estos incidentes, el jefe de las unidades de élite autorizó el uso de las armas por radio. Aunque los disparos habían comenzado antes, el teniente coronel A. explicó que había dado la orden porque quería asegurarse de que sus tropas se dieran cuenta de que “el carácter del incidente había cambiado”.
Asimismo, los soldados consultados por los investigadores dicen que los activistas habían disparado contra ellos provocando heridas de bala a dos militares. Después del incidente, señala Haaretz, se encontraron casquillos de 9 milímetros en el interior del barco, un tipo de bala que no utilizan los comandos militares.
Sin embargo, y a pesar de las fuertes presiones de la comunidad internacional, Israel no ha aportado públicamente pruebas que demuestren que los activistas pro palestinos portaban armas o municiones a bordo. Los integrantes del barco humanitario turco aseguran que estaban completamente desarmados y tan sólo utilizaron cuchillos, palos de madera y otros materiales que se pueden encontrar en cualquier barco para defenderse de las tropas militares completamente armadas y enmascaradas que asaltaron su navío en aguas internacionales.