Liberan a una presa de los 'siete de Casablanca'
“Degja Lachgar ha sido liberada provisionalmente, pero seguimos trabajando en su expediente y en el de los demás saharauis que están en Sale”, ha dicho a esta agencia Jadiya Marwasi. Marwasi es la secretaria general del Mediador por la Democracia y los Derechos Humanos, una ONG marroquí que ha jugado un papel vital en la puesta en libertad de la presa saharaui Degja Lachgar.
Lachgar ha salido este jueves de la cárcel de Sale, donde llevaba ya más de tres meses junto a otros seis saharauis, por su debilitado estado de salud, explica Marwasi. La saharaui fue detenida el pasado 8 de octubre a pie de pista, en el aeropuerto de Casablanca, tras viajar con una delegación a los campamentos de refugiados de Tinduf, en el árido desierto argelino.
En este grupo se encuentran importantes pesos pesados del activismo saharaui como Brahim Dahane, presidente de la Asociación Saharaui de Víctimas de Violaciones Graves de los Derechos Humanos (Asvdh), o Ali Salem Tamek, vicepresidente del Colectivo Saharaui de Defensores de los Derechos Humanos (Codesa), organización que preside Aminatu Haidar.
Fueron apresados tras su viaje a Tinduf por “dañar la seguridad externa del Estado”, según han condenado Amnistía Internacional y Human Rights Watch, que también han mostrado su preocupación porque los siete serán juzgados por un tribunal militar, que podría condenarles a pena de muerte, figura que todavía existe en la Justicia marroquí pero que no se ejecuta desde 1993.
Sigue el trabajo
La liberación provisional de Lachgar ha sido fruto del trabajo entre la ong de Marwasi y la Asvdh. “El martes que viene nos reunimos también con el director del centro penitenciario para hablar de la situación de los otros seis presos, que también necesitan que se mejoren sus condiciones de reclusión”, ha informado la secretaria general del Mediador para la Democracia.
Marwasi y Galia El Jimmi, vicepresidenta de la Asvdh, se han mostrado este jueves muy satisfechas del resultado de su cooperación. En palabras de la marroquí, “para que haya reconciliación y se encuentre una solución al conflicto es muy importante que marroquíes y saharauis, nuestras sociedades civiles, sepan acercarse la una a la otra y cooperar juntas; nosotros decidimos trabajar en el dossier de Degja por la grave situación humanitaria que estaba viviendo en la cárcel”.
Tras las presiones del Mediador para la Democracia, Marruecos aceptó que la saharaui ?cuya salud mental corría serio peligro- fuera examinada por un grupo de médicos. Sus informes fueron determinantes primero para que Degja Lachgar fuese trasladada de su celda de aislamiento a otra con presas comunes marroquíes, y ahora para su liberación provisional.
Llamamiento
“Pasará unos días en Rabat con Jadiya (Marwasi), para ir al médico, y luego podrá viajar ya a casa, a El Aaiún”, capital administrativa del Sáhara Occidental, ha asegurado Galia, quien ha aprovechado la ocasión “para pedir a las asociaciones internacionales de derechos humanos que presionen a Marruecos para que se libere sin condiciones al resto del grupo y los demás presos políticos saharauis”.
Lachgar es una vieja conocida de las prisiones marroquíes. A sus tres meses de cárcel ahora en Sale, hay que sumarle otros diez años como desaparecida saharaui en las cárceles alauíes durante los Años de Plomo de Hassan II.
