Mauritania se enfrenta a unas elecciones importantes para Canarias

Las elecciones pondrán fin a 11 meses de régimen militar. Pero también, las elecciones darán continuidad a las ayudas de la UE al país africano. La estabilidad es necesaria para ello. Las elecciones son obligatorias para que sigan en vigor. Por todo esto, y por otras presiones internacionales, los mauritanos están llamados a las urnas. Entre los candidatos: Dos golpistas y un funcionario con una larga carrera. Los favoritos: Los dos golpistas. Canarias mira de reojo, pues la inestabilidad en Mauritania significan que jóvenes africanos se jueguen la vida en el mar para llegar a tierras europeas.

La democracia anterior tuvo apenas dos años de vida. Vida con respiración asistida, aunque cuando fue asaltada ya había comenzado a andar de forma independiente. Mauritania está llamada, por Washington, a ser un ejemplo en la región. África Occidental, un polo económico de futuro, ha sufrido ciertos desmanes en las últimas fechas que han reducido sus credenciales democráticas. Guinea Conakry o Guinea Bissau son algunos de los ejemplos en los que la democracia ha visto reducida su acción.

Entre los candidatos favoritos hay dos golpistas. Abdelaziz, quién arrebató la democracia el pasado agosto, y Ely Ould Mohamed Vall, que ejecutó un golpe de Estado en 2005. Ahmed Ould Daddah, por su parte, representa una alternativa que no ha estado ligada con injerencias militares. Daddah, funcionario de larga y consolidada trayectoria, perdió la segunda vuelta de las elecciones de 2005, pero según los expertos es la opción más estable para el país. También es la que cuenta con menos opciones, pues según un diplomático mauritano afincado en España, “el populismo se ha adueñado de las calles de las principales ciudades”.

La Unión Europea y Estados Unidos han decidido no enviar observadores oficiales, pero no se descartan reportes informando de los acontecimientos que sucedan en el país mauritano. Europa había encontrado en la Mauritania democrática un socio estratégico de vital importancia para frenar la inmigración clandestina. A efectos prácticos, había encontrado un país ideal para hacer el efecto tapón. Hecho que para Canarias no es baladí. La estabilidad de Mauritania evita muertes en el mar de personas inocentes que huyen de un régimen prácticamente dictatorial.

El país africano además de celebrar unas elecciones limpias, necesita que lo parezcan. El no reconocimiento de esta condición por parte de la comunidad internacional puede hacer que el enfermo se quede sin alimentación asistida. O lo que es lo mismo que el éxodo de ciudadanos siga en marcha y las vidas caigan en el fondo del océano o en la inmensidad del desierto.

Para el periodo 2008-2013 la UE había previsto 156 millones de euros en ayudas y 72 más al año por un acuerdo relacionado con la pesca. Estos montantes ahora mismo están suspendidos a la espera del regreso de las urnas a la vida civil mauritana.

Noticias relacionadas

Mauritania, en el ojo del huracán

Etiquetas
stats