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Passos Coelho y Paulo Portas firman un acuerdo de gobierno para cuatro años

LISBOA, 16 (Europa Press/Raquel López)

El recién nombrado primer ministro de Portugal y presidente del Partido Socialdemócrata (PSD), Pedro Passos Coelho, firmó este jueves un acuerdo de gobierno con el líder del CDS-PP y tercera fuerza política tras las elecciones del 5 de junio, Paulo Portas, para formar un ejecutivo “estable” para los próximos cuatro años, prometiendo “resultados” a los portugueses y a la comunidad internacional.

Tras una reunión de algo más de una hora en un hotel de Lisboa, Passos Coelho y Paulo Portas escenificaron el acuerdo de gobierno entre ambos partidos once días después de las elecciones legislativas que dieron la victoria al PSD y motivaron la salida del socialista José Sócrates. “Este acuerdo es un bellísimo buen augurio de lo que será el trabajo futuro”, señaló Passos Coelho en una declaración posterior.

El primer ministro de Portugal afirmó que el acuerdo programático, titulado “mayoría para el cambio”, supone la formación de un gobierno “estable” que “no sólo dará cumplimiento a los acuerdos internacionales” firmados con la UE y el FMI a cambio del rescate financiero, sino que impulsará “transformaciones relevantes en materia económica y social” que ponga fin a décadas de pedidos de ayuda financiera.

Así, Passos Coelho afirmó que este gobierno supondrá “un nuevo ciclo para Portugal” en el que se realizarán las “reformas estructurales” que el país necesita, pero sin olvidar “a los más necesitados”. “Afrontaremos grandes dificultades, pero el Gobierno estará ahí para resolver esos problemas, y para ello es indispensable la recuperación de la confianza de los portugueses y de la comunidad internacional”, agregó.

UN PROGRAMA “EXIGENTE”

El primer ministro admitió que el país tiene por delante el programa económico “más exigente desde 1985”, fecha de la última intervención del FMI en el país, y la difícil tarea de recuperar la “confianza” de una sociedad que “llegó al límite de su paciencia tras años de frustración”, en referencia a los fallidos intentos del anterior gobierno socialista para poner fin a la crisis económica y de deuda.

No obstante, se mostró convencido de que el nuevo gobierno sabrá recuperar la confianza de los portugueses en las instituciones y la confianza de los mercados, de la que depende que Portugal vuelva a financiarse sin la ayuda de la comunidad internacional. Así, afirmó que esa confianza podrá llegar incluso antes del 2013, plazo que marca el programa firmado con la 'troika' a cambio de 78.000 millones de euros.

“Necesitamos sorprender, apostando por la transparencia y la apertura del país a una economía global, presentando más resultados que palabras”, enfatizó el primer ministro de Portugal. Según afirmó, el nuevo gobierno de coalición “creará las condiciones para que Portugal recupere la confianza de los mercados y de la comunidad internacional”, evitando así la situación que vive Grecia un año después de pedir el rescate.

En este contexto, Passos Coelho, que no reveló el contenido del acuerdo programático con el CDS argumentando que será conocido una vez sea constituido el Gobierno, destacó que el “esfuerzo” para “aproximar” los programas electorales de uno y otro partido, ocho días después de constituir los grupos de trabajo encargados de realizar las propuestas, es “un ejemplo” y un “bellísimo buen augurio del trabajo futuro”.

“Lo que nos espera es una tarea gigantesca y tenemos conciencia plena de la situación que el país vive”, señaló el primer ministro, quien avanzó que el futuro gobierno no utilizará como “disculpa” la difícil situación que vive el país para no realizar las reformas económicas necesarias. “Concentraremos toda nuestra energía y saber en liderar el cambio que pidieron los portugueses en las elecciones”, afirmó.

Por su parte, Paulo Portas resumió en tres palabras el acuerdo firmado, “coraje, cambio y moderación”. Según dijo, el nuevo Gobierno afronta el futuro “con coraje” para hacer frente a la “situación excepcional que vive el país”, para realizar el “cambio” que pidieron los portugueses y con “moderación” y capacidad de diálogo, dejando atrás seis años de “arrogancia”, dijo en referencia al gobierno socialista.

En este sentido, afirmó que el Gobierno hará “todo” lo que sea necesario para que el país no tenga que recurrir de nuevo a ayuda exterior. “Si hacemos todo lo que debemos, si gobernamos para las próximas generaciones y no para las próximas elecciones y si conseguimos que esta sea la última vez que una nación tan antigua y con una historia tan grande esté sujeta a peticiones de ayuda externa, creo que habremos cumplido con nuestro deber”, subrayó.

El acuerdo firmado por el PSD y CDS para las próxima legislatura incluye “acordar previamente y votar solidariamente” el programa de gobierno, mociones de confianza y de censura, presupuestos e iniciativas relativas al Programa de Estabilidad y Crecimiento (PEC) en consonancia por el programa económico firmado con el FMI y la UE para los próximos tres años.

Asimismo, ambos partidos se comprometen a coordinarse en votaciones que requieran mayoría absoluta o cualificada, incluyendo proyectos de revisión constitucional. Sin embargo, excluyen de este acuerdo el nombramiento del presidente de la República por existir “compromisos previos”. Ello se debe a que el PSD propondrá para este cargo al cabeza de lista por Lisboa, Fernando Nobre, pese a que no es aceptado por el CDS-PP.

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