Espacio de opinión de La Palma Ahora
Y los padres siguen sentándose con sus hijos
Una vez más empieza el curso y los padres y las madres siguen sentándose con sus hijos e hijas para realizar tareas, hacer trabajos, estudiar, etc. No es la primera vez que escribo en este o en otros medios sobre esta estúpida práctica, avalada por maestros/as y ampliamente secundada entre progenitores de cualquier clase social, pero es tan grande el perjuicio que le causamos a nuestra descendencia, que aporto en este texto nuevos argumentos.
Sin embargo, antes de mencionar varios de los argumentos que se deben tener en cuenta, se hace necesario indicar que, sentarse a realizar un trabajo con nuestros/as hijos/as, puede ser la única oportunidad que tengamos de construir una familia, de consolidar nuestras relaciones, sin olvidar que compartir esfuerzos entre descendientes y progenitores es una loable experiencia. De igual modo no es baladí recordar que cuando los padres/madres dejan de sentarse con sus hijos/as las notas pueden bajar considerablemente, y el rendimiento del niño/a de 8 años, se pone en cuarentena. Por otra parte hay un porcentaje menor, cuyas notas no sufren al no sentarse los padres. Invirtiéndose estos porcentajes cuando se habla del futuro de esos niños/as. Explico estos porcentajes: Aproximadamente un 80% de los/as niños/as que han tenido a sus progenitores al lado en la niñez tienen problemas en el futuro, y un 20% no tendrá problemas. Si como padres o madres podemos arriesgarnos a que en el futuro nuestros/as hijos/as sufran el enorme fracaso escolar que hay en la Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO), por habernos sentado con ellos en la niñez, como ocurre en el 80% de los casos, será nuestra responsabilidad, no la responsabilidad de políticos y educadores.
Entre los argumentos para erradicar esta práctica están los siguientes:
a) Se crea una gran dependencia de los padres/madres desde la niñez.
b) Se le está indicando al niño/a que sólo no es capaz.
c) Los estas acostumbrando a que alguien los controle. Que alguien regule su conducta. No los estamos enseñando a estudiar solos.
d) Se está estableciendo un férreo control en la niñez imposible de llevar a cabo en la adolescencia.
e) No se genera una autonomía que permita al niño/a adquirir hábitos de estudio.
f) Se le está hurtando el derecho a descubrir el mundo a partir de su trabajo.
g) Raro es el padre que sabe enseñar a los niños a estudiar y a realizar exámenes.
h) Muchos padres/madres terminan peleando con sus hijos porque no son profesionales de la enseñanza.
Para no cansar, los deberes deben realizarse personalmente sin la ayuda de terceros, lo contrario evidencia que en clase no se ha explicado correctamente la materia, o que el alumno/a no ha prestado suficiente atención, problemas que las familias deben de poner en conocimiento del centro para su correcta solución.