Caravana de protesta en defensa de la caza menor
La caza menor, en La Palma, corre peligro de extinción, según sostiene el presidente de la Federación Insular de la referida actividad cinegética, Francisco Javier Tena Triana. En este sentido, ha asegurado a LA PALMA AHORA que, al no recoger la Orden General de Caza de Canarias del Gobierno regional las normas específicas que se venían aplicando hasta ahora en La Palma, la repetida práctica “puede desaparecer” en la Isla. Por tal motivo, dijo, han decidido movilizarse y, al efecto, han organizado para el próximo sábado, 10 de agosto, “una caravana de protesta en defensa de la caza menor en La Palma”.
La concentración, ha anunciado, tendrá lugar, a las 10.00 horas, en el aeropuerto viejo situado en la zona de Buenavista (Breña Alta). Precisó que se ha llevará a cabo “una preconcentración en El Paso para los cazadores de los municipios de la comarca del Noroeste”.
La caravana de protesta en defensa de la caza menor en La Palma tiene previsto partir, rumbo a Santa Cruz de La Palma, entre las 11.00 y 11.30 horas. En la capital, recorrerán las avenidas principales de la ciudad y entregarán un documento reivindicativo en la sede insular de la Administración General del Estado. Posteriormente, los cazadores se desplazarán a sus respectivos municipios para distribuir entre la población el reseñado escrito.
Tena Triana explicó que “el principal problema” es que, este año, por primeva vez, en la Orden General de Caza de Canarias que regula la actividad en la presente temporada, iniciada el pasado 4 de agosto, “no se recoge la modalidad de cuadrilla específica para La Palma”. La misma está formada por un mínimo de tres cazadores y un máximo de cinco que tienen autorizado “llevar un total 15 perros” de tal forma que si alguno de sus miembros, como se venía haciendo desde 2001, no puede un día ir a cazar, los demás, incluso uno solo, pueden salir al campo con todos los canes.
La supresión de tal “excepcionalidad” es “un obstáculo sin sentido que va a provocar un grave problema” ya que, entre las 265 cuadrillas registradas, integradas por más de 1.300 cazadores con licencia, “sobrarán muchos perros” que serán “regalados, abandonados o, en el peor de los casos, sacrificados”, expuso Tena Triana.
Insistió en que el Cabildo debe “defender” su autonomía en esta materia y, como establece el acuerdo adoptado por el Consejo Insular de Caza, mantener ante el órgano regional “la correspondiente regulación específica en la Isla” como se venía haciendo desde hace 12 años.
Subrayó que la reseñada propuesta, en la orden regional, se modificó en varios puntos. Además del señalado, también “elimina la tórtola como especie cinegética” por “figurar en el catálogo nacional” de aves protegidas pese a que la misma “se ha cazado desde siempre en La Palma porque la hemos regulado de tal forma que no se impedía la reproducción de esta especie migratoria”. Manifestó que “la sorpresa es que, después de tantos años, la Administración ha suprimido su caza aquí, en La Palma, no así en el resto del Estado”.
Con la codorniz, añadió, “ha ocurrido otro tanto de lo mismo; en La Palma hay muy pocas y, aunque figura como pieza, no la cazábamos, pero insistimos en que no la dejen fuera de la relación de especies cinegéticas, porque, cuando se quita, ya no se vuelve a poner”
En La Palma, subrayó el presidente de la Federación Insular, están censados unos 3.000 cazadores, si bien “renuevan las licencias cada año unos 1.800 para cazar en la modalidad de cuadrilla”. Apuntó que la presente temporada empezó el pasado domingo, 4 de agosto. “No hubo mucha caza” ya que, explicó, la enfermedad vírico-hemorragica que suele afectar a los conejos, ha mermado de forma significativa a los citados roedores. “Se vieron palomas y perdices, pero pocos conejos”, comentó. No descarta el que se tengan que “estudiar medidas”, aunque asevera que, “el mejor” regulador “son los propios aficionados” pues, concluyó, “si no hay caza, no van a cazar”.