Felipe González defiende el sistema de pensiones de la “solidaridad”
Pide más corresponsabilidad a Europa ante los acontecimientos en el Magreb y señala que más importenque que el G-8, es llegar a acuerdos en el G-20
AVILÉS/OVIEDO, 28 (EUROPA PRESS)
El ex presidente del Gobierno, Felipe González, ha defendido en Avilés el sistema de pensiones basado en la “solidaridad” y adaptado a los cambios demográficos. González ha hecho esta afirmación durante su conferencia sobre la gobernanza en tiempos de crisis, con la que ha abierto el ciclo de conferencias 'Prisma' del Centro Cultural Internacional Óscar Niemeyer, donde se darán encuentro personalidades de liderazgo internacional.
“Cómo puede ser una tristeza que vivamos más. Creemos en un sistema público de pensiones basado en la solidaridad”, ha señalado. No obstante, ha reconocido que se vive más y se trabaja menos tiempo que antes y eso “no hay manera de arreglarlo”. “Se puede decir con claridad sin dejar de ser progresista y con la mirada en los desafíos que quedan por delante”, asevera.
En esta línea, el ex presidente también comentó, en tono coloquial, que a punto de cumplir 69 años niega que cobre una pensión de jubilación. “Es mentira. Pero ahora que lo dicen en el parlamento voy a haber si la activo”, ha señalado con ironía.
Felipe González, que ha sido presentado por el presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, ante la presencia de la presidenta de la Junta General, María Jesús Álvarez, varios consejeros y diputados autonómicos, otras personalidades y cientos de ciudadanos, ha incidido en que es fundamental hacer las reformas necesarias, no porque lo pidan los mercados, sino porque son claves para reforzar el sistema productivo y la cohesión social.
Así, ha rechazo el discurso neoliberal de que “hay que volver a la senda de la productividad perdida”, ya que considera que si se retorna a la misma senda se volverá a tener “el mismo resultado”, es decir, otra crisis.
En un marco internacional en el que la globalización hace que los problemas locales se conviertan en mundiales, y éstos a su vez afecten y deban resolverse localmente, González ha analizado las tendencias políticas y la situación de la izquierda.
Para el ex presidente, la izquierda “denuncia la causa de la crisis en la hegemonía de ese pensamiento capitalista, pero no ofrece alternativa” porque no se atreve a decir las cosas y tomar decisiones duras. Al respecto, González señala que frente a las polarizaciones de izquierdas y derechas, la alternativa real se da “desde la socialdemocracia”, y se muestra preocupado por la “galopada hacia populismos demagógicos” que hacen “peligrar la gobernanza”.
Asimismo, ha remarcado que “la responsabilidad de gobernar en defensa de los intereses generales es una responsabilidad que tiene su propia ética y que no es contradictoria con el mantenimiento de los principios”.
NORTE DE ÁFRICA Y GLOBALIZACIÓN
Felipe González también ha hecho referencia en su intervención a la situación que actualmente se vive en los países del norte de África, y entiende que además de revoluciones populares son revoluciones tecnológicas y ejemplos de la globalización. Al respecto, ha apuntado la necesidad de una mayor corresponsabilidad por parte de los países europeos frente a su estado de “paralización”.
El ex presidente señala que en Europa se ha actuado en relación con los países del Magreb priorizado la seguridad, pero también “algunos intereses económicos no siempre transparentes”. Por ello, ha pedido que cuando se dice que se defienden “intereses nacionales”, se aclare “de qué se trata”.
Felipe González considera que se está viviendo una crisis de gobernanza global que se ha visto agravada por la crisis del capitalismo. Por ello, advierte que, aunque cueste relegar al G-8, hay que asumir que lo importante es llegar a acuerdos en el G-20.