Mas insta a Montilla para que convoque elecciones si el TC lo tumba
BARCELONA, 26 (EUROPA PRESS)
El presidente de CiU, Artur Mas, urgió este sábado al presidente de la Generalitat, José Montilla, a convocar elecciones “cuanto antes” tras el verano si el Tribunal Constitucional (TC) dicta una sentencia en breve que recorte el Estatut.
En una entrevista a Europa Press, aseguró que no es una petición de elecciones anticipadas, escudándose en que la legislatura quedará agotada tras el verano, sino que responde a la necesidad de que haya “un gobierno nuevo, con mayoría fuerte en el Parlament avalada por el voto popular, y con cuatro años por delante para poder organizar la respuesta que sea necesaria”.
“Y digo esto con la tranquilidad y la autoridad de que yo nunca, en ningún momento, he pedido elecciones anticipadas en esta legislatura, y he tenido muchas ocasiones para hacerlo”, añadió el líder de CiU, quien aventuró que todos los indicios apuntan que el TC dictará sentencia las próximas semanas.
Para Mas no tendría sentido prolongar hasta finales de noviembre la convocatoria de elecciones si el TC tumbara el Estatut, ni que la reacción llegara a finales de un mandato liderado por un Govern, los socios del cual están, a su juicio, “en desacuerdo en casi todo, hasta en las reacciones más básicas”.
Por ello, y teniendo en cuenta que las elecciones deben celebrarse en otoño, instó a Montilla a convocarlas cuanto antes. “Mejor a finales de septiembre, que en octubre o noviembre”, sostuvo.
CONTACTOS “DISCRETOS” CON MONTILLA
Mas desveló que ha mantenido “diversos contactos discretos” de forma regular y periódica en los últimos meses con el presidente de la Generalitat para explorar y perfilar una respuesta conjunta ante una sentencia contraria al Estatut, aunque no han fijado un plan concreto.
Pese a no dudar de una primera reacción por parte de Montilla, Mas expuso los tres puntos que considera imprescindibles impulsar antes de las elecciones si el TC rebaja el Estatut. En primer lugar, una votación en el Parlament en la que CiU rechace políticamente la sentencia del TC, “y espero que otros partidos se añadan a este voto contrario”.
Planteó también que Montilla debe convocar una cumbre de partidos catalanes para exponer y organizar una primera reflexión y reacción al respecto, al tiempo que opinó que debe celebrarse una manifestación “pacífica y serena, pero firme y contundente” de rechazo a la sentencia, aunque llegue en plena crisis y en verano.
Al preguntársele si hay consenso con Montilla para impulsar estas iniciativas, Mas insistió en que las conversaciones que han mantenido son preliminares, aunque apuntó que el problema para que haya una reacción conjunta recae en el PSC. “El PSC se apunta, más o menos, a esta estrategia, pero en Madrid queda cojo”, lamentó.
Si el TC modifica el Estatut, el líder de CiU avisó de que no se conformarán y que Cataluña debe abrir un nuevo marco político, lo que pasaría por reclamar el concierto económico en la próxima legislatura. Por contra, descartó la celebración de un referéndum de independencia durante los próximos cuatro años, alegando que no hay una mayoría social en Cataluña que llevara esta posibilidad a la victoria.
NO A UN GOBIERNO “TECNÓCRATA”
Tras defender que CiU integra a muchas sensibilidades y que cuenta con todo el mundo, insistió en su objetivo de querer un gobierno integrado “por los mejores”, lo que no pasa por integrar a dirigentes de otros partidos, sino por buscar gente de referencia de la sociedad catalana.
Sin embargo, negó que el gobierno de los mejores sea “el gobierno de los tecnócratas”, palabra que admitió que le disgusta porque tiene ciertas connotaciones negativas. “El liderazgo de un gobierno lo marca el presidente, y en nuestro caso el presidente no será un tecnócrata”, afirmó.
Aclaró, pese a todo, que no ha dado “ni un solo paso” en este sentido, y que sólo lo hará una vez gane las elecciones y sea presidente de la Generalitat. Lo dijo en respuesta a los rumores de que podría haber tanteado al presidente de Abertis, Salvador Alemany, para que sea el futuro conseller de Economía.
“Ni con Alemany ni con nadie he hecho un paso así, y el único que lo puede hacer soy yo. Es una función exclusiva del presidente”, concluyó.