Los agricultores se citan de nuevo con la UE en enero para frenar acuerdos con Marruecos si incluyen Sáhara
COAG Canarias advierte que acuerdos no pueden ser oportunidad para los especuladores ante las inversiones de multinacionales en la zona
SANTA CRUZ DE TENERIFE, 18 (EUROPA PRESS)
Una carta del Banco Mundial, Robert Zoellick, firmada en 2004 y en la que argumenta a Estados Unidos que no se puede sellar un acuerdo con Marruecos que incluya el territorio del Sáhara Occidental ha sido el argumento que han llevado debajo del brazo los agricultores de la UE a la reunión con el vicepresidente de la Comisión de Agricultura y que ha permitido, tras otras reuniones, que el próximo día 12 de enero de 2011 la Comisión de Exteriores permita al sector expresar su opinión ante el acuerdo de Asociación con Marruecos.
Entre los presentes estuvo el presidente de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos de Canarias, Rafael Hernández, que ha acudido al lugar en representación de la confederación. Este, en declaraciones a Europa Press, ha insistido en que este acuerdo de asociación es “ilegal” porque incluye los territorios ocupados.
Hernández ha mostrado su satisfacción por la posibilidad que se otorga ahora al sector de conocer su posición ante este acuerdo el próximo año ante la denominada Comisión Exterior. La mencionada carta de Zoellick reconoce que es imposible firmar un acuerdo en un espacio en el que aún no se ha definido su situación internacional. “El tratamiento y las tarifas sólo pueden ser aplicadas en Marruecos y no en los territorios del Sáhara Occidental”, se ha subrayado en la carta del presidente del Banco Mundial.
Por otro lado, Rafael Hernández ha desvelado que ahora mismo existen grupos de inversión de Arabia Saudí que están comprando terrenos en la zona. “No puede ser que un acuerdo con la UE sea una oportunidad para la especulación”, ha advertido el presidente de COAG-Canarias que ha insistido en que esto se da en otros casos en donde la población no se beneficia, sino que los dineros van a manos de multinacionales.
