El paseo de Tacoronte supera su último escollo
El paseo marítimo de Tacoronte que discurrirá a lo largo de dos kilómetros entre El Pris y Mesa del Mar tiene ya vía libre para su ejecución. El Tribunal Supremo (TS) acaba de rechazar el recurso presentado por el Organismo Autónomo Balsas de Tenerife (Balten) dependiente del Cabildo que se oponía a que se derribara un depósito de agua de riego que se encuentra a lo largo de este trazado diseñado por el Ministerio de Medio Ambiente. Este era el último escollo para desbloquear al menos sobre el papel la obra dado que ya se han cerrado el resto de ocupaciones que invaden los terrenos de Costas y que suman una veintena de propiedades.
El alcalde de Tacoronte, Álvaro Dávila, se lamenta de que una vez que el proyecto ha superado sus últimos escollos judiciales ahora tengan que enfrentarse a las restricciones presupuestarias del Gobierno central y a la necesidad de proceder a una revisión de los precios. “Después de más de diez años de tener el proyecto sobre la mesa listo para ejecutarlo ahora habrá que ponerlo a la cola de todas las obras que se van a hacer en el litoral en España”, dice el alcalde. Balten ha perdido todos los recursos que ha presentado ante las diferentes instancias judiciales y también se rechazó su propuesta para que el futuro paseo pasara por encima del depósito dado el incremento de costes que traería consigo.
Balten quería acogerse a las excepciones recogidas en la Ley de Costas que permite la ubicación de determinadas instalaciones en la zona de servidumbre siempre que sean de interés público lo que en su caso considera que quedaba acreditado. Sin embargo, el Supremo indica que la construcción de un paseo marítimo “no constituye una actuación llevada a cabo con finalidades meramente estéticas sino que con tal proyecto se persigue la defensa de un interés público específicamente protegido”.
Recuerda el TS que la Ley de Costas garantiza el uso sin restricciones de las zonas de servidumbres de tránsito y el acceso al mar con el fin de garantizar su disfrute por parte de todos los ciudadanos. Con esta finalidad la propia legislación contempla la adopción de diversas medidas como son precisamente la construcción de paseos. Sostiene además el Supremo que Balten “no ha justificado la existencia de otro interés público que deba prevalecer sobre el definido legalmente y protegido” en la ley de Costas. Aunque el TS no cuestiona el servicio que presta el depósito de agua para el riego, “no encontramos una normal legal de la que deducir una excepción a la preservación de la zona de servidumbre de tránsito para mantener unas instalaciones ubicadas en la misma”.
Tampoco se comparte el punto de vista defendido por Balten en el sentido de que las instalaciones se encuentran en perfecto estado de funcionamiento y el TS considera que tampoco se ha acreditado “la realidad del servicio que dice prestar ni la imposibilidad de mantenerlo en otra ubicación y ni siquiera su estado de conservación”. Los informes emitidos en este sentido están firmados por un ingeniero de Caminos que ostenta el cargo de presidente de la Comunidad de Aguas El Pris, “de forma que carecen totalmente de la necesaria objetividad para hacer pruebas en contra de lo recogido en la resolución impugnada”.
Los dictámenes suscritos por el ingeniero técnico agrícola municipal de Tacoronte y por el arquitecto de este Ayuntamiento resultaron “contradictorios”, aunque en todo caso el Supremo apunta que Costas tiene vía libre para recuperar medioambientalmente este borde costero “y la eliminación de todas las construcciones que invaden el dominio público”.