La muestra de Rodin en Santa Cruz de Tenerife ha recibido más de 5.000 visitas
SANTA CRUZ DE TENERIFE, 29 (EUROPA PRESS)
La exposición sobre la obra del escultor François-Auguste Rodin (1840-1917), que CajaCanarias exhibe en su Espacio Cultural de Santa Cruz de Tenerife, ha recibido en menos de 20 días la visita de 5.000 personas, lo que representa un éxito sin precedentes en la trayectoria cultural de la entidad.
Esta propuesta que podrá visitarse hasta el 30 de abril recoge 54 esculturas en bronce, mármol y yeso del maestro francés, considerado padre de la escultura moderna, que se exhiben por primera vez la isla de Tenerife, y que pertenecen a la colección del Museo Soumaya-Fundación Carlos Slim de México, según informó la entidad de ahorro.
En el caso de las visitas y talleres didácticos programados para escolares, el cupo se encuentra casi cubierto aunque todavía quedan turnos para los meses abril, pudiendo inscribirse los centros educativos interesados. También se pondrá en marcha en el mes de marzo un programa específico para invidentes, quienes podrán conocer las esculturas expuestas gracias al sentido del tacto, y en el que ya no quedan plazas libres.
OBRAS
En esta exposición puede contemplarse un buen número de las obras maestras de Rodin que ya forman parte del imaginario universal: 'El pensador', 'El beso' o 'La eterna primavera', que siguen seduciendo al espectador por su virtuosismo clasicista.
El grueso de las figuras expuestas en 'La era de Rodin' traslada al espectador al ideario estético de la Francia del siglo XIX, como la 'Máscara de la nariz rota' (1864), en la que el escultor rompe con el academicismo entonces imperante.
También se puede contemplar una maqueta de 'Los burgueses de Calais' o los bocetos de 'La puerta del infierno', los dos proyectos más entrañables de Rodin. De este último merecen especial atención dos presencias icónicas para la cultura universal: 'El pensador' (1880-1881), emblema del pensamiento libre, y 'El beso' (1886), aliento del amor.
El mundo del retrato también está presente en esta colección, como la figura idealizada de 'Suzón' (1873), esculpida en su juventud; 'Lady Sackville' (1913), donde se plasma la madurez del escultor; o 'Balzac con hábito de monje dominico' (1892), valorado como un hito de la escultura moderna.
El tema de la fragmentación y el movimiento reúne en esta muestra manos y bailarinas que plasman figuraciones y volúmenes precursores del vanguardismo en escultura como 'La catedral' (1908), 'La gran mano crispada' (1884-1886) y el 'Estudio para Iris, mensajera de los dioses' (1890-1891).
El nombre de la muestra, 'La era de Rodin', alude a la duración y características durante cierto tiempo de la creación artística de Rodin. En concreto, esta colección reúne los proyectos más importantes del escultor francés, los mitos y alegorías con que revalorizó las fuentes clásicas, así como su legado, que se manifiesta en el aliento con que formó a las nuevas generaciones.
La exposición incluye también algunas de las obras más distintivas de otros cinco escultores franceses contemporáneos de Rodin. Así, se puede contemplar 'El arquero', de su alumno Émile-Antoine Bourdelle; 'La ola' y 'El gran vals', de Camille Claudel, modelo y amante de Rodin; o 'El genio de la danza' y 'Cupido desarmado', del que fuera uno de sus maestros, Jean-Baptiste Carpeaux. También hay trabajos de Paul Dubois y Albert Ernest Carrier-Belleuse.