Soria retira su confianza a Pérez-Camacho y éste dimite

El portavoz parlamentario del Partido Popular, Miguel Cabrera Pérez-Camacho, ha presentado este sábado su dimisión al entender que ha perdido la confianza del presidente del PP en Canarias, José Manuel Soria, según confirmó el diputado.

“En el día de hoy he presentado mi dimisión como portavoz parlamentario en razón a que mis críticas a la visita del presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, a la dictadura cubana, han motivado la pérdida de confianza del presidente regional del PP, José Manuel Soria”, argumentó.

El diputado del PP aseguró que “a partir de este momento” no va a hacer más declaraciones o comentarios al respecto.

Fuentes parlamentarias aseguraron este sábado a CANARIAS AHORA que la portavocía del PP será asumida por María Australia Navarro, que acumula esa responsabilidad a la de presidenta del Grupo Parlamentario Popular.

Soria telefoneó la mañana de este sábado a Pérez-Camacho para informarle de que había perdido su confianza en él, lo que llevó al portavoz a plantear al presidente del PP su inmediata dimisión. Esta retirada de confianza se produce, sin embargo, cuatro días después de que Pérez-Camacho criticara el viaje de Paulino Rivero a Cuba, y tres desde que Soria declarase que se trataba de opioniones personales del que hasta este sábado era su portavoz parlamentario.

Santiago Pérez habló poco antes de desautorización

Poco antes de que se conociera la dimisión de Pérez-Camacho, el portavoz del PSC, Santiago Pérez, había comentado las diferencias existentes entre el dimisionario vocero y el presidente del PP canario, José Manuel Soria, a propósito del proytecto de Ley de Participación Ciudadana. Pérez-Camacho, según rememoró Pérez, “la calificó de churro y advirtió que sería enmendada por presentar elementos de inconstitucionalidad, los mismos que votó a favor en el Gobierno José Manuel Soria”.

Pérez recalcó que, “cada vez con más contundencia, Soria desautoriza a su portavoz parlamentario, porque Cabrera Pérez-Camacho da la impresión de que se cree las cosas que dice, pero 'su zeñorito' no, ya que sólo se mueve por su instinto de poder, para lo que es capaz de llevar el cinismo político y la falta de principios hasta cotas insuperables”.

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