“Atracar el bufé durante los días de vacaciones es un error”
La nutricionista del Centro Médico Tres Ramblas, ubicado en Las Palmas de Gran Canaria, Patricia Varela, recomienda mantener los hábitos alimentarios durante el verano y afirma que “ atracar el bufé durante 15 días de vacaciones es un error”.
Varela explica a Canarias Ahora las pautas a seguir durante la época estival y advierte sobre las dietas que se pueden encontrar en Internet. “Ahora mismo hay mucho intrusismo profesional en la red, todo el mundo se atreve a recomendar dietas sin ser un profesional capacitado para ello”, puntualiza.
¿A qué se dedica exactamente una nutricionista?
La nutricionista se dedica sobretodo a guiar a la población a través del plan de educación nutricional, o a los pacientes en consulta, sobre cómo tienen que comer. Por un lado, en consulta, intenta ayudar a la gente a tener hábitos más sanos, tanto para adelgazar o para adaptar la alimentación a un estado, como por ejemplo el embarazo o una enfermedad, como el cáncer. Depende de la patología que se tenga o la edad, se tiene que comer de una determinada forma.
Porque lo que sirve a una sola persona no se aplica al resto.
No, cada persona tiene un plan determinado según el resultado de sus analíticas, su estado de salud, su edad, altura, sexo...hay muchas cosas que intervienen a la hora de elaborar un plan de nutrición.
Por lo tanto, ¿para elaborar un plan de nutrición el paciente siempre tendrá que hacerse un análisis de sangre?
Normalmente siempre se pide una analítica, para ver si todo está bien y, en función de eso, ya se puede determinar qué es lo mejor que le va a sentar a esa persona. Hay que hacer una historia del paciente y hacerle preguntas sobre antecedentes familiares, enfermedades, fármacos que toma y ver qué come, para lo que hay que elaborar un registro de 24 horas o cuestionar la frecuencia en que consume alimentos. A partir de ahí se le modifican los hábitos.
Se puede decir que la nutrición es una especialidad un tanto nueva
Es bastante nueva en general. Yo creo que la ciencia llega a los 500 años, que es poco. El nutricionista todavía no está reconocido como profesional sanitario y, por lo tanto, no existe en los hospitales ni en los centros de salud. Es una profesión bastante nueva que no está muy reconocida. Ya se están haciendo colegios de nutricionistas, pero hasta hace poco solo existían las asociaciones. Aunque cada vez están empujando más fuerte, todavía hay que hacer mucho trabajo para que estén en los hospitales.
La forma en que nos alimentamos preocupa cada vez más a la sociedad debido a ciertas enfermedades, como el cáncer. ¿Es cierto que dependiendo de lo que comamos podemos favorecer o evitar esta enfermedad?
Está visto que las carnes rojas o demasiados alimentos procesados que tomamos, por ejemplo, pueden influir en el cáncer. Sobretodo las grasas saturadas y las carnes rojas. Aunque todo el mundo puede estar predispuesto genéticamente y no a todos nos sienta igual lo que ingerimos, hay estudios epidemiológicos que han comprobado que hay ciertos alimentos que se relacionan con ciertas enfermedades.
¿Cuáles son las claves de una buena nutrición durante los meses de verano?
Realmente, una persona que tenga hábitos saludables durante todo el año solo tiene que mantenerlos. Quizás va a tomar alimentos más frescos o ligeros, sobretodo por la temperatura y el calor. Lo más recomendable son las frutas de temporada, que tienen mucha agua, porque lo más importante durante el verano es la hidratación. Al sudar más, las personas ancianas, que no tienen la sensación de sed tan desarrollada como el resto, deben tener más cuidado con la hidratación.
Estamos de vacaciones, así que tomamos más productos fritos, más helados...hay que seguir manteniendo más o menos los mismos hábitos que todo el año y, de vez en cuando, permitirnos un pequeño lujo, pero que sea la excepción.
Sin embargo, al llegar esta temporada hay personas que tratan de perder peso.
Lo ideal es que se haga durante todo el año, no creo que el verano sea la mejor época, pero es verdad que es el momento en el que todo el mundo quiere lucir bañador. Podemos aprovechar ahora, que hace calor, y tomar más pescado y fruta de temporada, como la sandía o el melón.
¿Es contraproducente iniciar repentinamente una dieta fuerte?
Sí, eso no está bien. Lo ideal es mantener unos hábitos durante todo el año para que el peso no fluctúe mucho. Puedes subir o bajar unos kilos, pero no de forma rápida, porque el cuerpo tenderá a recuperarlos lo antes posible.
¿Qué opina de las dietas que se pueden encontrar por Internet?
No creo que sean buenas, las dietas tienen que estar adaptadas a cada persona. Una dieta publicada en Internet no se sabe ni para que tipo de persona está destinada, ni quién la ha hecho. Ahora mismo hay mucho intrusismo profesional en la red, todo el mundo se atreve a recomendar dietas sin ser un profesional capacitado para ello. Yo no haría mucho caso, a menos que sean de médicos o recomendaciones generales de ciertas Webs certificadas y hechas por profesionales. No me fiaría de las recetas mágicas.
¿Se refiere a las pastillas que se venden como adelgazantes?
Sí, hay muchas pastillas, mucha publicidad... realmente pastillas mágicas no existen. Puede ayudar la fibra a la gente que tenga estreñimiento, gente que retenga a lo mejor un poco de líquido, pero la base de la alimentación es lo más importante para adelgazar, además de hacer ejercicio.
¿Qué le puede acarrear a una persona el meterse en una de estas dietas sin hacerse un estudio previo?
Puede tener efectos secundarios. Están muy de moda las dietas hiperproteicas y se ha visto que pueden tener efectos al riñón a largo plazo, además de los efectos rebote que siempre se ven. La gente se pone, adelgaza muy rápido y luego engorda más. No solo recupera su peso, sino que coge kilos de más, con lo que al final no está obteniendo el objetivo. A nivel de salud se suele ver a largo plazo, pero es peligroso, especialmente si la persona tiene problemas renales.
Durante las vacaciones la alimentación cambia, ya sea gracias a un “todo incluido” o a un viaje al extranjero, ¿Cómo influye ese cambio?
Yo creo que si tienes unos bueno hábitos los vas a seguir manteniendo durante el verano. Algún día te los puedes saltar, pero el que durante 15 días de vacaciones estés atracando el bufé es un error, significa que no tienes unos hábitos creados y los derrumbas durante el verano. Esto te puede producir gastritis o digestiones pesadas, además, suelen cometerse excesos de azúcares y grasas por todo lo que es bollería, dulces... nos estamos tomando en verano, de repente, una explosión a la que se junta el alcohol, porque salimos más y bebemos más. Hay que tener cuidado con eso. Lo ideal es mantener los hábitos de lunes a viernes, aunque es raro que una persona que se vaya de vacaciones no coja peso.
¿Los niños tienen que seguir también algunas pautas de alimentación durante el verano?
Lo mismo, muy importante la hidratación y aprovechar para tomar más fruta. A veces, en los colegios, no todos los menús están lo bien que queremos. Sobre todo sería ideal educar al niño, aprovechando que está más tiempo en casa, para que empiece a tomar más fruta, ensalada y hortalizas, alimentos a los que algunas escuelas no prestan tanta atención. Además de introducir durante el verano alimentos fresquitos, gazpacho, cremas frías... cosas así, para que el niño se vaya acostumbrando a incluirlos en la alimentación, ya que durante el año es raro que los introduzca.