Bruselas apuesta por la diplomacia frente a los asiáticos de Guinea Conakry
Frattini recordó los casos del Happy Day y el Marine I para hacer referencia a cuando “se gestionó una situación similar, al detectar hace unos seis meses un barco chatarra que transportaba cientos de inmigrantes asiáticos de forma ilegal. En esa ocasión se contó con la cooperación del tercer país implicado, así como con la gestión diplomática española”.
El director general adjunto de Frontex, Gil Arias, confirmó este martes la presencia de miles de asiáticos, cuya cifra exacta no se puede determinar, procedentes de países como Sri Lanka, India o Pakistán, que durante los últimos meses han ido llegando vía aérea a Guinea Conakry y esperan zarpar en un barco chatarra hacia las costas europeas.
Arias apuntó que las redes de traficantes de seres humanos adquieren estos buques a un precio muy barato ya que son muy viejos y se encuentran en condiciones para el desguace. No obstante, permiten realizar una travesía más larga que los cayucos y reúnen las condiciones mínimas para llegar a Cabo Verde, las Islas Canarias o a la zona de rescate de algún país europeo, explicaba Arias.
El valor positivo de la inmigración
Frattini hizo estas declaraciones tras intervenir en una conferencia denominada Creando estrategias migratorias celebrada este jueves en la Eurocámara en la que hizo un balance del enfoque global en migración de la Unión Europea.
Tras repasar las propuestas ya adoptadas, el vicepresidente de la Comisión Europea anunció la próxima presentación, en el mes de octubre, de la tarjeta azul, que supondrá una “forma de permiso de empleo para trabajadores altamente cualificados” que podrán moverse en el territorio comunitario aunque, insistió, tanto el número como la categoría de los inmigrantes es competencia de cada país.
El comisario europeo de Libertad, Seguridad y Justicia aaseguró que no sólo las leyes son necesarias para afrontar con éxito el fenómeno migratorio sino que también es imprescindibles “ayudar a cambiar la mentalidad de las personas mostrando la oportunidad que ofrece la inmigración”.
En este mismo sentido, su homólogo de Empleo, Asuntos Sociales e Igualdad de Oportunidades, Vladimir Spidla, quien también participó en esta conferencia, destacó la necesidad de “recalcar” ante la sociedad europea la “riqueza de los inmigrantes en términos culturales”.
Spidla subrayó que la “Unión Europea debe afrontar los retos del cambio demográfico y la demanda del mercado laboral”. Por lo que la cuestión “no está en plantearnos si se necesita inmigración o no, sino si vamos a ser capaces de integrar a los inmigrantes”.
Para lograr esta integración el “desafío reside en el empleo”, afirmó el comisario europeo de este área que añadió que debe tratarse de un trabajo legal y estable.
El Fondo Social Europeo (FSE), que cumple sus 50 años de existencia, es el programa dirigido a para formar a las personas y reducir el desempleo. Entre 2007 y 2013, durante la nueva agenda de programación de los fondos estructurales y de cohesión, contará con un presupuesto de 76 mil millones de euros, y cada año cofinancia la formación de nueve millones de personas de los cuales, 600. mil son inmigrantes o pertenecen a una minoría étnica.