Médicos y expertos impulsan una técnica para combatir la obesidad sin pasar por la cirugía
La cifra de personas con obesidad en España se ha incrementado en los últimos años. Según los datos de la Sociedad Española de Cardiología, cuatro de cada diez españoles sufre problemas de sobrepeso y Canarias es una de las comunidades con mayor índice de personas que lo padecen. Esta circunstancia ha llevado a médicos y expertos a estudiar nuevas técnicas que permitan reducirlo. Una de las últimas es Aspire, una sonda que elimina la grasa corporal sin necesidad de cirugía.
El doctor Román Turró explica a Canarias Ahora que se trata de una técnica endoscópica que elimina parte del contenido gástrico a través de un tubo con acceso al estómago y es el mismo paciente el que realiza el vaciado. La aspiración de alimentos ingeridos se realiza después de cada ingesta, unas tres veces al día después de cada comida principal.
La aspiración está controlada, ya que la sonda no podrá extraer más de un 30% de lo que ingiere el paciente, por lo que el organismo sigue recibiendo los suficientes nutrientes para la actividad diaria. Turró (que es especialista en Endoscopia digestiva) señala que la parte terminal es un tubo de aproximadamente un centímetro y medio o dos de diámetro y, aunque es visible, el paciente puede hacer una vida normal sin restricciones. Además, puede quitárselo cuando decida.
La técnica está indicada en pacientes con obesidades de grado dos y obesidad mórbida y en pacientes con un índice de masa corporal superior a 38. La Administración para Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos dio el pasado año su aprobación al dispositivo también conocido en España como Bypass Externo.
Una solución más pero no sustituye a los hábitos saludables
Turró indica que “no deja de ser un tratamiento médico y como tal debe ser consensuado entre médico y paciente No es una indicación global para cualquier paciente”. Afirma que, ante el hecho de que España esté posicionada como el segundo país de Europa con más casos de obesidad, “tenemos mucha limitación de opciones terapéuticas para ofrecer a los pacientes y la realidad es que la propia industria y el propio cuerpo médico se va dando cuenta de que es importante la prevención y ofrecer distintas opciones a pacientes que están en esta situación”. Aspire, por tanto, no deja de ser “una opción más” y está indicada para un paciente específico.
La realidad es que no todo el mundo está dispuesto a pasar por el quirófano y que las listas de espera en Sanidad Pública son muy altas. Por ello, el doctor se congratula de que cada vez existan más soluciones. “Tener más alternativas nos da más potencial para atender a más pacientes”. Según añade, la cirugía funciona muy bien pero “hay mucha gente a la que ese paso le resulta demasiado grande y no están dispuestos o no tienen la consciencia suficiente para tomar esa solución”.
No obstante, también aclara que, relacionado con la obesidad, “en medicina no hay ningún tratamiento curativo, y que ”lo único que se puede ofrecer son distintas ayudas y tratamientos que no dejan de ser una modificación en los hábitos“. Y es que ”es 100% seguro que es imposible conseguir un peso saludable sin llevar una vida sana“.
Recuerda que Aspire es una medida complementaria y que no puede ser sustitutiva de llevar una vida sana. Además, debe ser controlada por un equipo médico. De hecho, la válvula lleva un contador que limita el número de aspiraciones que puede realizar el paciente y se bloquea cuándo llega al final del contador. De este modo, aproximadamente cada cinco semanas, el paciente debe ir a revisión médica para que los especialistas realicen un control de su evolución y puedan poner en marcha de nuevo el contador.
