Muere en Madrid con coronavirus el empresario palmero Wilebaldo Luis Yanes

El empresario palmero Wilebaldo Luis Yanes, de 79 años, falleció este jueves en Madrid con coronavirus, han informado a este periódico personas allegadas. Se encontraba ingresado en un hospital de la capital aquejado de otras afecciones, que se complicaron con el virus COVID-19. Hasta hace tres semanas se le había podido ver en compañía de dos amigos grancanarios departiendo con normalidad en un hotel madrileño. Pero su dolencia respiratoria se agravó con el coronavirus y tuvo que ser hospitalizado.

Wilebaldo Luis Yanes era un empresario discreto afincado en Las Palmas de Gran Canaria con una especial habilidad para cultivar las relaciones humanas. Eso le hizo acreedor de una amplia agenda de contactos entre los que se encontraban, además de poderosos e influyentes empresarios, magistrados, altos funcionarios y políticos bien situados en los entornos del poder.

Fueron esas relaciones las que, a la postre, lo harían famoso involuntariamente. A principios de 2006 resultó detenido en el marco de la operación Eolo, por la que el magistrado Miguel Ángel Parramón investigó la adjudicación de un concurso de adjudicación de potencia eólica desde la Consejería de Industria del Gobierno regional, en aquel entonces en manos de Luis Soria (PP), hermano de José Manuel Soria. A Yanes llegaron las bases del concurso vía correo electrónico antes de que se publicaran.

En medio de esa investigación, la Policía detectó una conversación sospechosa en la que el empresario era aconsejado por el presidente de la Audiencia Provincial de Las Palmas, su amigo José Antonio Martín, de cómo debía declarar el hermano de uno de sus socios, en prisión provisional por estar involucrado entonces en una operación de narcotráfico. El magistrado fue condenado por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias pero luego fue absuelto por el Supremo por un error en la calificación del delito por parte del Ministerio Fiscal. Martín no regresó nunca a la carrera efectiva como magistrado por sobrevenirle la jubilación. El empresario fue condenado a ocho meses de inhabilitación para cargo público y a una multa de cinco meses con cuota diaria de 30 euros.

Al año siguiente de su detención, en 2007, Luis Yanes quedaba exonerado de responsabilidades en el caso Eolo, y en 2018, el resto de encausados terminaron condenados a penas leves de cárcel, en algunos casos reconociendo por completo los hechos, y en otros, negándolos.