Pequeño Valiente abre una sede en Lanzarote para ayudar a familias que afrontan casos de cáncer infantil

Más de una veintena de familias que enfrentan casos de cáncer infantil cuentan ya con una ayuda nueva y más cercana al entrar en funcionamiento la primera sede en Lanzarote de la Fundación Canaria Pequeño Valiente, que ha inaugurado este viernes esa organización impulsada por progenitores de otros pacientes y ha celebrado en un comunicado el Cabildo Insular.

La corporación insular subvenciona a la organización costeando el alquiler del local, situado en la calle Figueroa de la capital de la isla, Arrecife. El presidente del Cabildo, Oswaldo Betancort, que asistió al acto junto al consejero del Área de Bienestar Social e Inclusión, Marci Acuña, ha declarado, según destaca la nota, que “este es un pequeño paso para dar comodidad y seguridad a más de veinte familias aquí, en Lanzarote”. “Hay que seguir aunando esfuerzos para conseguir que el traslado, el tratamiento, y el proceso en general, sea lo más llevadero posible para los propios niños y niñas, así como sus familiares”, ha añadido.

Betancort intervino y “felicitó a todas las asociaciones, por su valioso papel en la sociedad, y al área de Bienestar Social, por estar siempre atenta ante cualquier demanda”.

Pequeño Valiente ya contaba con sedes en otras dos islas, Gran Canaria, donde nació, y Tenerife. Comenzó su andadura en 2006 por iniciativa de personas cuyos hijos e hijas estaban hospitalizados en la Unidad de Oncohematología Pediátrica del Hospital Materno Infantil y acordaron trabajar conjuntamente por mejorar sus condiciones de vida ante carencias que consideraban había en la asistencia a los menores y su entorno.

La fundación se define como una entidad autonómica sin ánimo de lucro cuya misión principal es mejorar la calidad de vida de los niños y niñas con cáncer y de sus familias, e intentar que el proceso sea lo más liviano posible.

El texto recoge también unas declaraciones del presidente de la asociación, Jose Juan Jerez: “Ahora mismo tenemos a una trabajadora social más gracias a este centro físico, y esperamos tener un fisioterapeuta y un dietista fijos en la isla, presencial o telemáticamente, y seguir creciendo y ayudando a la ciudadanía afectada en el tránsito de esta enfermedad para que no se sientan solos en toda esta vivencia”.