Rivero anima a los artesanos a innovar para ser más competitivos
Más de 200 artesanos participan en la XXV Feria de Artesanía de Canarias, que exhibe réplicas de tradiciones como las alfombras del Corpus de La Orotava o los Papahuevos de Gran Canaria, y en la que el presidente Paulino Rivero alentó al sector a innovar para ser más competitivos.
La Feria, que organiza el Cabildo de Tenerife y financia el Gobierno regional, presenta los trabajos de artesanos de unas 50 modalidades diferentes distribuidos en una superficie de más de 3.000 metros cuadrados, que podrán verse de forma gratuita en el recinto ferial de la capital tinerfeña hasta el 6 de diciembre.
En la inauguración el presidente canario, Paulino Rivero, afirmó que los artesanos mantienen vivas las tradiciones de un pueblo y además generan actividad económica.
Rivero recordó que Gobierno y cabildos han consensuado el Plan de Artesanía de Canarias, que estará dotado hasta 2015 con 4,5 millones de euros, y en el que se prevé la creación de la marca Artesanía canaria.
Con esta iniciativa se pretende evitar el fraude en este tipo de productos y proteger la producción artesanal isleña, añadió.
Rivero consideró “muy importante” que los jóvenes artesanos introduzcan la innovación al tiempo que se mantienen las tradiciones, pues de esta manera el sector será más competitivo y comercial, y la juventud apreciará “lo que se hace con sus manos”.
El consejero de Empleo, Industria y Comercio, Jorge Rodríguez, señaló que el Gobierno canario tiene “la mano tendida” al sector, en el que en Canarias trabajan unos 2.200 artesanos.
Artesanía y turismo van de la mano
José Manuel Bermúdez, vicepresidente del Cabildo de Tenerife, precisó que la artesanía “es un magnífico complemento” a la principal actividad económica canaria, el turismo, ya que los visitantes buscan sensaciones diferentes, lo que no existe en su país y que diferencia a las islas de otros destinos.
El consejero de Desarrollo Económico de la misma corporación, Efraín Medina, afirmó que “comprar artesanía es adquirir patrimonio para que pase de generación en generación”, pues los artesanos son “los fieles guardianes de la tradición”.
En la feria se muestran tradiciones como el barco de la romería de San Marcos en Tegueste, los hachitos y las cestas y bollos de Icod de los Vinos o las libreas de El Palmar de Buenavista del Norte, al tiempo que los visitantes pueden ver cómo se confecciona una típica cruz de flores de las Fiestas de Mayo de Santa Cruz de Tenerife.
Por La Palma se muestran también las cruces de mayo de Breña Alta, los “caballos fufos” de Tazacorte y el diablo de Tijarabe, mientras que La Gomera aporta un ramo de Arure.
La decoración de la feria está realizada con las guirnaldas de papel de las fiestas de San Roque de Garachico y las varas engalanadas de la Romería de San Isidro en La Orotava, y entre los puestos figura la artesanía del calado, los timples, camisetas con símbolos autóctonos como las pintaderas, puros, dulces y licores caseros y diseños artesanos de muebles, lámparas o joyas.
El Cabildo de Tenerife ha realizado además una invitación “masiva” para asistir a la feria, para lo que ha repartido 40.000 invitaciones en las paradas de guaguas y tranvía, colegios y asociaciones.
También ha previsto informar sobre la feria a los turistas brasileños, franceses, italianos, británicos, alemanes y estadounidenses que visitarán la capital tinerfeña a bordo de diferentes barcos durante las fechas en que se celebra esta iniciativa, la más importante en su sector que se celebra en Canarias.
