Cerrado y multado uno de los locales de la calle Clavel por celebrar el Carnaval sin medidas de seguridad
El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, a través de su Gerencia de Urbanismo, ha resuelto el expediente iniciado por diversos incumplimientos detectados en un local ubicado en la calle El Clavel con el cierre de este durante tres meses y la imposición de una multa de 20.000 euros.
El responsable de la Gerencia de Urbanismo, Carlos Tarife, ha manifestado en un comunicado que “debemos ser justos con quienes cumplen las reglas, que son la mayoría, y muy contundentes con quienes no lo hacen, como es el caso”.
El expediente tramitado por la Gerencia de Urbanismo viene de otro, desarrollado entre 2018 y 2019, cuando se detectó la primera de las irregularidades en el local sancionado, señala la nota municipal.
En concreto, se trataba del incumplimiento de las condiciones impuestas en el título habilitante, respecto a las actividades musicales que en dicho local se desarrollaban.
A este expediente se sumaron sendas actas por infracción administrativa levantadas por la Policía Local por carecer de los permisos necesarios e incumplir el horario establecido en las últimas semanas.
Además de notificar al interesado para que aporte cuantas alegaciones estime oportunas, se propone la imposición de dos multas, una de 15.000 euros por infracción muy grave, y otra de 5.000 euros, por infracción grave, así como la clausura del establecimiento por un plazo de tres meses, cierre al que se ha procedido esta misma tarde.
Carlos Tarife ha destacado “el esfuerzo y la eficacia de los funcionarios de la Gerencia de Urbanismo que han permitido al Ayuntamiento resolver un expediente que, a pesar de su dificultad, pone fin a una situación que venía provocando quejas de vecinos en la zona y que hace justicia con el resto de locales que sí cumple con las condiciones en las que deben desarrollar su labor, que son la mayoría”.
El local en cuestión es uno de los ubicados en la calle Clavel de la capital tinerfeña en los que, según se supo por un vídeo que circuló por redes sociales, se permitió el pasado viernes que numerosas personas bailaran y cantaran sin mascarillas, sin distancia de seguridad e incumpliendo las medidas de restricción extraordinarias aprobadas por el Gobierno de Canarias.
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