La Palma escapó, de momento

Estaba obligado Gabriel Mato, presidente del Parlamento, a hacer todo lo que ha hecho por la causa pepera estos últimos días. Ha perdido el apoyo incondicional del presidente de su partido, José Manuel Soria, y hay quien dice que la crisis de Fuerteventura, con ese pedazo de marqués, ha evitado que su Excelencia se fijara de modo especial en la isla bonita. De momento, y como aviso a navegantes, Mato se ha tenido que comer con papas la imposición del número dos al Parlamento, Asier Antona, su jefe de gabinete en la Cámara, que se confiesa un hombre de partido, no necesariamente de Mato. Las expectativas no son buenas para los populares palmeros, y Soria ha considerado que una persona joven y preparada como Asier puede resolverle algo en lugar de ese diputado hooligan que se llama Ernesto Aguiar.