La investigación no ha hecho más que empezar, pero los primeros datos apuntan a que los centros que el Gobierno ha puesto bajo sospecha son la Clínica Parque, de Santa Cruz de Tenerife; el Centro Médico Vida, con dependencias en Icod de los Vinos y Puerto de la Cruz, y Centros Médicos Salus Canarias, que tiene consultas en La Orotava y en el Puerto de la Cruz. Los primeros datos apuntan asimismo a un alto cargo sanitario con sede en la isla de Tenerife, que teóricamente habría desviado pacientes de los hospitales públicos de las islas hacia esas clínicas no concertadas, saltándose cualquier tipo de protocolo establecido y, por supuesto, el amplio listado de clínicas concertadas que ya cuestan un tremendo pastón al erario público. Pero habrá que esperar a que se confirmen las primeras sospechas, si es que este Gobierno se anima a llegar hasta el fondo en los asuntos que le dejó envenenados su socio y compañerito del alma.