Marcial Morales debía convertirse ahora en nuevo alcalde de Puerto del Rosario, en sustitución de Manuel Travieso, pero esta moción de censura podría frustar ese nombramiento. Morales despierta muchos recelos en las filas socialistas, o al menos en aquellas que lo consideran un muñidor político de primer grado que, pese a su apariencia de no romper nunca un plato, es el que corta el bacalao en la pata majorera de CC, sector romaní. No tiene tan mal concepto Domingo Fuentes Curbelo, que a pesar de los traspiés que se lleva en el Cabildo de manos de su socio asambleario Domingo Berriel, fue capaz de emitir un documento de apoyo a Morales a sabiendas de que no tenía ni el respaldo de su Ejecutiva ni mucho menos el de los cuatro concejales de la capital.