La Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Cantabria ha realizado las pertinentes pruebas de PCR a los diez pescadores que permanecen en cuarentena preventiva en el albergue de Solórzano, que el Gobierno de Cantabria ha habilitado como centro COVID para extremar las precauciones, anticipar la detección de posibles casos y proceder de inmediato a su aislamiento y evitar así el riesgo de transmisión de la enfermedad.
El resultado de las pruebas realizadas indica que la mayoría de los marineros ha dado negativo, detectando un solo nuevo caso en uno de los tripulantes de otra de las embarcaciones que faenaban en aguas de Cantabria y que se suma a los otros dos detectados entre el viernes y el sábado en una primera embarcación.
Todos ellos, que proceden de Burela (Lugo), localidad en situación de brote, y que se encontraban faenando estos días en aguas de Cantabria, presentan un buen estado de salud y se someterán esta semana a nuevas pruebas de seguimiento en el marco de la activación de todos los protocolos de control y seguimiento del Gobierno de Cantabria.
En caso de que no aparezcan nuevos casos positivos y su estado de salud continúe evolucionando de manera favorable como hasta ahora, Salud Pública calcula que el próximo viernes podría dar de alta a los primeros marineros.
Salud Pública hace un llamamiento a la responsabilidad de la ciudadanía para que extreme las precauciones, respete el distanciamiento social y cumpla con las medidas preventivas y de higiene sanitarias.