El representante de los docentes jubilados dice que la educación “no ha hecho más que mejorar” en los últimos 40 años
SANTANDER, 29 (EUROPA PRESS)
Cantabria ha rendido homenaje hoy a los 250 docentes que se han jubilado en el curso 2019-2020 “de la forma más extraña que hubiésemos podido imaginar”, frente a una pantalla por el Covid, y siendo “una certeza imprescindible” para los más de 90.000 alumnos cántabros en aquellos momentos de incertidumbre.
“Os supisteis adaptar, encontrar soluciones no siempre fáciles para dar a los alumnos mucho más que el temario: la certeza de que seguíais ahí, de que su formación no paraba. La confianza en que, más pronto que tarde, volverían a las aulas”.
Así lo ha dicho la consejera de Educación, Marina Lombó, durante su intervención en el acto institucional organizado en el Parlamento con motivo del Día de Docente 2021, donde, junto con el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y seis docentes en representación de los jubilados, ha felicitado al conjunto de la comunidad educativa regional por su comportamiento durante la pandemia.
Una pandemia que ha marcado el acto, sin a penas público, y los discursos de los ponentes, excepto el del exdirector del IES Villajunco de Santander, Roberto Abad, quien, en representación de los docentes jubilados, ha centrado su intervención en el hecho de que la educación en España y en Cantabria “no ha hecho más que mejorar”, y aunque no todo en los últimos 40 años ha sido bueno, el balance “es muy positivo”, ha asegurado.
Abad ha asegurado que los alumnos “salen mejor preparados” de los centros que antes, sobre todo para afrontar un mundo “tan cambiante y diverso”, como en su opinión ha demostrado la pandemia de Covid.
Tras agradecer a las autoridades el “esfuerzo y desvelo porque la educación fuese la adecuada” para los alumnos, Abad ha concluido asegurando que “si volviera a nacer, volvería a ser docente”.
Por su parte, Revilla ha asegurado que el sistema educativo “ha estado a la altura de las circunstancias y ha salvado la complicada situación de una manera muy adecuada, hasta el punto que podemos decir que es un refugio contra el coronavirus”, por lo que ha felicitado a la comunidad educativa por su comportamiento durante la pandemia.
Pese a las voces que auguraban una “explosión de contagios”, Revilla ha subrayado que la educación de Cantabria ha “salvado la papeleta” gracias al compromiso del alumnado, del profesorado y de las familias y también a las medidas adoptadas por el Gobierno regional.
“Hemos hecho un esfuerzo extraordinario. Hoy hay 500 personas más en el sistema educativo de Cantabria y se han hecho inversiones muy cuantiosas en seguridad, compra de ordenadores para seguir las clases desde casa... No todo lo hacemos mal”, ha enfatizado.
Revilla se ha mostrado ilusionado con respecto al futuro de la educación de Cantabria y ha dicho que ve cada vez más próximo el final de la crisis sanitaria de la mano de las vacunas.
Por su parte, Lombó ha subrayado la “vocación, esfuerzo y trabajo diario” de los docentes cántabros y ha alabado su capacidad de adaptación a las difíciles circunstancias provocadas por la Covid-19 para asegurar la continuidad de la enseñanza en el último trimestre del curso pasado.
Según ha dicho, aquellos meses supusieron un “desafío inaudito” para la sociedad en general y para el sistema educativo, que ahora afronta “el curso más complicado que hayamos podido conocer”, en el que la “responsabilidad” de la comunidad educativa está permitiendo al alumnado seguir aprendiendo de forma presencial en las aulas de Cantabria.
A pesar de todas las dificultades que surgen a diario, la consejera ha valorado la respuesta ejemplar de la educación cántabra. “Creo que lo estamos consiguiendo, gracias fundamentalmente al trabajo conjunto que la Consejería de Educación, junto con Sanidad, han realizado para llevar a cabo unos protocolos seguros, al esfuerzo indiscutible de toda la comunidad educativa, de los equipos directivos, de los docentes, del personal no docente y del alumnado y sus familias”, ha apuntado.
Al igual que el presidente, ha felicitado a los profesionales jubilados durante el pasado curso y ha expresado su deseo de que el próximo año vuelva la normalidad al sistema educativo y también a este homenaje que, pese a las circunstancias, este año había que celebrar “más que nunca”.
El acto conmemorativo, mucho más reducido que en años anteriores como consecuencia de la pandemia, ha reunido en el patio central del Parlamento a una pequeña selección de representantes institucionales y miembros de la comunidad educativa de Cantabria.
Además de Revilla y Lombó, han intervenido el presidente del Parlamento, Joaquín Gómez.
El regalo institucional que el Gobierno de Cantabria entregará este año a los 250 profesores jubilados es una acuarela de la pintora campurriana Alicia Cañas, además del libro 'Vidas Maestras'. La pintura original se cederá al IES Montesclaros de Reinosa, centro en el que estudió la artista, que es, a su vez, diplomada en Educación.
La celebración del Día del Docente ha incluido la actuación de dos músicas del Conservatorio de Torrelavega.