“La Universidad pública debe asegurarse de que todos puedan seguir con sus estudios”

Francisco José Quiles (Villena, 1962) trabaja en la Universidad de Castilla-La Mancha desde 1987. Es actualmente director del Departamento de Sistemas Informáticos, así como Catedrático de Arquitectura y Tecnologías de Computadores, por lo que cuenta con las condiciones necesarias para ser rector de la Universidad. No es la primera vez que se presenta como candidato a la rectoría de la UCLM y quiere recordar que en las últimas elecciones el resultado fue “muy ajustado”, de medio punto de diferencia con Miguel Ángel Collado, el actual rector. 

El plan que presenta como posible nuevo rector de la institución es simple, pero también diferente al que Collado ha desarrollado en los últimos años. “Creo que puede devolver la ilusión, prestigio, actividad y la presencia a la Universidad de Castilla-La Mancha”, asegura Quiles, rematando que con sus ideas la institución podrá ser “realmente” de la región, y contribuir así también a su desarrollo, económico y social. En definitiva, hacer de la Universidad algo más “competitivo”, en captación de alumnos y tambié, y sobre todo, en investigación. 

En la presentación de su candidatura, de hecho, Quiles señaló que el número de alumnos que se matriculaban en la UCLM ha bajado en un 45% en los últimos cinco años, lo que asegura se debe a la pérdida de “prestigio, potencial cultural y de referente en la transferencia de investigación” que ha sufrido la Universidad en los últimos años. Esto, lo argumenta señalando que no hay explicación ni en la baja de natalidad ni en el número de estudiantes que se examinan en Castilla-La Mancha en las pruebas de acceso a la Universidad.

Uno de los puntos clave para Quiles, como lo ha sido también para otros colectivos, es la investigación. “En general la investigación de las Universidades españolas ha sufrido bastante, pero en Castilla-La Mancha se ha visto fuertemente perjudicada en los últimos años”, puntualiza, pero reconoce que existe la necesidad de plantear un programa propio de investigación en Castilla-La Mancha que se mantenga durante todo un mandato, para potenciar los grupos ya consolidados. Además, se reafirma en la importancia que tiene la investigación como una puerta abierta para los empresarios. “Potenciar el acercamiento a las empresas es igual de importante, porque así se contribuye al desarrollo general y también para hacer más competitivo el tejido industrial regional”, afirma el catedrático. 

Más allá de la investigación, el profesor tiene claro que las relaciones con los alumnos son también de vital importancia cuando se es rector. “Debemos estar preocupado de sus problemas, los que empiezan por dar facilidades en la matriculación y en el pago de las tasas”, ha asegurado Quiles. En este sentido ha sido firme al señalar que la “Universidad pública debe asegurarse de que todos puedan seguir con sus estudios”, y que la sensibilidad debe ser especial en los casos “extremos”, cuando las familias no pueden pagar las tasas. En este sentido, ha criticado las ayudas de emergencia lanzadas por la UCLM, ya que fueron planteadas “bastante más tarde” que en el resto de las universidades españolas. Es por esto que quedaron “limitadas”, y para evitar que esto se repita se debe llegar a un acuerdo “adecuado” con la Junta de Comunidades. 

Otro de los problemas que identifica el catedrático es la limitación de la Universidad al contratar los profesores, debido a las “diferentes leyes” que han puesto trabas de hecho a esta capacidad. “Hay problemas graves de profesorado en algunas carreras, lo que se suma a las jubilaciones en otras y resulta en un panorama de profesores insuficientes en algunas titulaciones”, afirma Quiles. Por esto propone terminar con esta limitación general, dándole una prioridad “razonable” teniendo en cuenta la situación del país. “Pero, necesitamos garantizar que haya profesorado mínimo en todas las titulaciones”, puntualiza. En término de infraestructuras, su postura es la misma. “Durante cuatro años han estado paradas, y para eso tenemos que terminar con la absoluta congelación de fondos que hemos sufrido”, asegura el profesor, quien remata “ahora es cuando tenemos que luchar”.