La portada de mañana
Acceder
El PSOE convierte su Comité Federal en un acto de aclamación a Pedro Sánchez
Las generaciones sin 'colchón' inmobiliario ni ahorros
Opinión - El extraño regreso de unas manos muy sucias. Por Pere Rusiñol

Aragonès presume de haber cumplido un tercio de su programa en el primer año pese a la escasez legislativa

Arturo Puente

0

El Govern saca pecho por su primer año de mandato pese a que la sequía legislativa no ha notado el cambio de caras en el Ejecutivo. El president Pere Aragonès y el vicepresident Jordi Puigneró han comparecido este martes para presentar el balance de 12 meses de andadura en los que, según sus cálculos, ya han cumplido más de un tercio de todo el plan de gobierno que se habían propuesto llevar a cabo a lo largo de la legislatura. El principal ámbito de cumplimiento es el educativo, donde el Ejecutivo asegura que ya ha cumplido un 43%, mientras que el que tiene más atrasado es el eje feminista, donde según sus cálculos se han quedado en el 26% de las medidas previstas en los próximos cuatro años.

Coincidiendo con este primer aniversario, la Generalitat ha lanzado una herramienta desde la que se podrá seguir el grado de cumplimiento de su programa, de cada una de las 782 medidas y 702 submedidas que presentaron en su momento y que se estructuran en 5 ejes y 19 ámbitos, evaluados mediante porcentajes. De esos ámbitos, la mayoría están por encima del 33% de cumplimiento, siendo las más avanzas las políticas de vivienda (41,7%), la articulación territorial (41,2%), agenda rural (41,2%) o acción exterior (38%). Mientras, en el lado opuesto quedan tres ámbitos que no han llegado al objetivo mínimo del primer año: el buen gobierno (21,9%), empresa y tejido productivo (23,2%) o igualdad y Derechos Humanos (23,4%).

El vicepresident ha sido el encargado de repasar algunas de las principales medidas, como el inicio de la gratuidad escolar en la etapa de P2, el decreto de renovables, el impulso al transporte público –pese a que el Govern continúa reclamando el traspaso de Rodalies– o la mejora de la inversión en vivienda, que en la partida de los presupuestos de este año ha llegado a los 1.000 millones de euros.

Aragonés y Puigneró han destacado que este primer año ha estado marcado por la salida definitiva de la pandemia, en un primer momento, y hacer frente a las consecuencias de la guerra de Ucrania durante los últimos meses. Pese a que estas dos cuestiones han sido centrales para el Govern, el president de la Generalitat ha asegurado que se han “sentado las bases de la transformación en Catalunya”. Pugineró, por su parte, ha asegurado que las prioridades del Govern están “en la línea de los organismos internacionales como la UE o el Forum Económico Mundial” y el hombre fuerte de Junts ha citado “el reto migratorio, al cambio climático y la digitalización”.

El balance triunfalista que hace el Govern sobre las medidas ejecutivas de este primer año chocan con una agenda legislativa más bien escasa, tanto en normas aprobadas por la Cámara como en normativa remitida. Desde el inicio de la legislatura el Ejecutivo ha presentado ocho proyectos de ley, dos de los cuales relativos a los presupuestos y uno más que es una modificación de ley. De estos, solo tres han quedado aprobados y el resto está en fase de trámite. En la legislatura pasada se aprobaron un total de 32 leyes en tres años, aunque su primer año fue aún menos fértil en leyes, pues no consiguió aprobar ninguna norma de entidad durante 14 meses.

“La aprobación de una ley por parte del Parlament requiere de tiempo”, aseguró Aragonès en una entrevista con este diario el mes pasado, en. la que aseguró sentirse satisfecho de su balance legislativo. “En estos momentos el Ejecutivo está trabajando en proyectos legislativos que requieren de tiempo y que en los próximos meses van a llegar al Parlament, desde la ley de Comunicación Audiovisual, la de Función Pública, a leyes en el ámbito sanitario o cultural. La agenda legislativa a partir del segundo año va a verse incrementada”, aseguró.

Este martes, ya con el primer aniversario cumplido, Aragonès ha puesto también el foco sobre dos cuestiones que centran las preocupaciones del Govern. Por un lado, el catalán en la escuela, debido a las sentencias que imponen un 25% de castellano de forma general en el sistema escolar catalán. Sobre esta cuestión, el republicano ha evitado entrar en detalles para no entorpecer las negociaciones que discurren en el Parlament entre los grupos del PSC, ERC, Junts y comuns, pero ha asegurado que el acuerdo está “cercano” y ha pedido “el máximo consenso” en un tema que ha señalado como central para su Ejecutivo.

Sobre la segunda de sus grandes preocupaciones, la “resolución del conflicto”, Aragonès ha sido más directo.  “La evolución [de la mesa de diálogo con el Gobierno] no está avanzando como se esperaba”, ha reconocido. “Desde los indultos no ha habido avances. El espionaje masivo no hace más que incidir en la desconfianza. Por eso, es necesario que el Gobierno se mueva”, ha añadido el jefe del Govern. Unos minutos antes el vicepresident Puigneró también había subrayado que, a su parecer, el conflicto era la carpeta principal que tenían que resolver la Generalitat.