València declara desierto el concurso de asesoría financiera de la empresa pública de vivienda y cambia el proceso

El Consejo de Administración de la Sociedad Anónima Municipal Actuaciones Urbanas del Ayuntamiento de València (Aumsa), la empresa pública de vivienda de València, declarará este jueves desierto el concurso para su asesoría financiera al que optó la mercantil que gestiona el hijo de un exconseller del PP. El orden del día propone declarar desierta la licitación de una de las ramas del concurso, la referente a la asistencia técnica y gestión en materia económico-financiera, presupuestaria y contable, que fue recurrida ante el tribunal de recursos contractuales.

Al conjunto de los tres lotes se presentaron una decena de empresas, entre ellas Dula Auditores, que quedó excluida y recurrió ante el tribunal. Aumsa descartó a la mercantil por “no haber aportado servicios realizados de igual o similar naturaleza al objeto del contrato que se licita, cuyos destinatarios sean del sector público, y que superen los importes indicados en los pliegos.”

El representante de la empresa, Eduardo Such, hijo del que fuera conseller de Turismo Diego Such, presentó un recurso que tuvo como medida cautelar paralizar el procedimiento del contrato de asesoría financiera, por valor de 55.000 euros para dos años. La mercantil alegó que el Gobierno valenciano le ha otorgado 24.000 euros en contratos públicos para evitar su exclusión del procedimiento, pero el Tribunal avaló su exclusión rechazando su recurso. No consideró que hubiera actuado de mala fe, por lo que no se interpuso sanción.

El tribunal de recursos contractuales acordó también levantar el procedimiento cautelar y permitir que se siguiera con el proceso. Sin embargo, la siguiente resolución del Consejo de Administración plantea dejar la licitación desierta y cambiar el proceso a un negociado sin publicidad, popularmente conocidos con el término crítico 'a dedo'. En concreto, dice la resolución, se acuerda “iniciar una nueva convocatoria mediante procedimiento negociado, sin la previa publicación de un anuncio de licitación, para la adjudicación del Lote 2 del indicado contrato de servicios”. Argumenta el consistorio que “sí podrá declararse desierta una licitación en la que no exista ninguna oferta o proposición”, como justificación de la medida.