El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha abierto la puerta a la posibilidad de que se frene la tramitación del proyecto de macrocelulosa de Altri para Palas de Rei (Lugo). La administración gallega continúa adelante con el procedimiento, pero, “si por el camino la empresa toma otras decisiones, no tendrá sentido”, dijo.
Rueda respondió así a las preguntas sobre si su equipo se plantea dar carpetazo a los planes de instalar la fábrica de macrocelulosa después de que se presentase el borrador de la planificación eléctrica para 2030, en el que el Gobierno central deja fuera la conexión que necesita Altri. Tras esa decisión, la Xunta dio por hecho que la construcción de la planta ya no es viable. Pese a ello, el presidente gallego asegura que su equipo seguirá cumpliendo con los trámites que tiene pendientes.
El proyecto recibió la declaración de impacto ambiental favorable en marzo. Entonces la previsión era que el siguiente hito administrativo, que es la autorización ambiental integrada, estuviese listo antes del verano. Entrado ya el otoño, ese paso sigue pendiente. En la Consellería de Medio de Ambiente no han explicado los motivos de que el proceso se esté demorando más de lo anunciado y se limitan a señalar que está pendiente de “algunos trámites intermedios”. Una vez esté dictada esa autorización ambiental integrada, esta deberá todavía someterse al trámite de alegaciones, indica.
Tampoco Rueda ha explicado por qué no está aún lista la autorización, pero ha considerado que antes que poner el foco en la tramitación por parte de la Xunta -o, por lo menos, “al mismo tiempo”-, hay que ponerlo en las decisiones del Gobierno central de dejar a Altri fuera de las ayudas del PERTE de descarbonización por no cumplir los criterios o de excluir de la planificación la conexión eléctrica que necesita. Las conclusiones de su equipo son “técnicas”, mientras que las del Gobierno central son “políticas”.
Ahora, Rueda apunta a la propia empresa para determinar si el proyecto sigue o no adelante. Altri anunció que recurrirá la decisión del Gobierno central sobre la conexión eléctrica, pero no ha aclarado si abandonará o no el proyecto en caso de que no se le dé la razón.