El continente a examen
Los mandatarios de América Latina y Norteamérica han tenido que enfrentarse a un peculiar examen. La consultora Mitofsky ha hecho público un informe que revela el grado de apoyo popular que tiene cada presidente americano.
Según este estudio, el presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, es el mandatario con más apoyo popular de toda la región con un 91% de aprobación frente al escaso porcentaje que aglutina su homóloga Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, un 19%. Barack Obama también se encuentra entre los peor valorados.
Dos meses después de su toma de posesión, el mandatario panameño recibe un fuerte respaldo de su población. El 91% de los encuestados aprueba la gestión de su presidente, convirtiéndole en el mejor valorado de toda la región.
El segundo puesto lo ocupa el presidente de El Salvador, Mauricio Funes, que cumplidos sus primeros 100 días de gobierno obtiene el apoyo del 88% de los encuestados, cuatro puntos por encima del respaldo que le otorgó la población nada más llegar al poder.
Otro de los líderes mejor valorados fue el mandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, cuyas gestiones en materia económica y en política internacional le han valido el aplauso de su población con un respaldo del 83%, dos puntos por encima de la valoración registrada en septiembre.
En cuarto lugar se sitúa la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, con un 81% de apoyo popular a pocos días de que tenga que abandonar el gobierno, tras la celebración de la segunda vuelta de las elecciones chilenas en la que el conservador Sebastián Piñera se alzó con la victoria este domingo.
Algo peor valorados, aunque consiguiendo un aprobado, se encuentran mandatarios como el colombiano, Álvaro Uribe, quien obtiene un 64% tras nueve años en el poder marcados por la acción del gobierno contra las Fuerzas Revolucionarias Militares de Colombia (FARC) y grupos paramilitares.
También logra superar el 50% de aprobados, el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez,
que en apenas un año ha incrementando en un 19% su popularidad hasta alcanzar el 61% de respaldo popular.
Casi con la misma cifra se encuentra el líder indígena, Evo Morales, que recibe el apoyo del 60% de la población nada más iniciar su segunda legislatura, en la que tendrá que implementar el proyecto “plurinacional” recogido en la nueva Constitución del país.
En el límite del aprobado se sitúa el presidente de México, Felipe Calderón, que después de cumplir la mitad de los 6 años para los que fue electo y en medio de la crisis económica que afecta a este país, alcanza el 55% de popularidad, siete puntos menos que hace un año.
Por su parte, el paraguayo, Fernando Lugo, apenas obtiene el 50% de aprobación popular, en un año marcado por los escándalos de paternidad que amenazan la credibilidad del presidente y que podrían costarle un juicio político, impulsado por la oposición en el Congreso.
El mandatario de Estados Unidos, Barack Obama, ha formado también parte de este estudio, en el que ha obtenido una mala valoración. Obama ha conseguido un 48 % del apoyo popular, muy por debajo del 60% de popularidad que obtenía nada más iniciar su mandato. Los retos internacionales como la misión en Afganistán o la polémica generada a nivel interno por su reforma sanitaria han sido los principales lastres para el repunte de Obama.
Por su parte, el mandatario de Guatemala, Álvaro Colom, arranca el año con un 46%
de aprobación, por delante del 44% que los costarricenses otorgan a su presidente, Óscar Arias, valedor del premio Nobel de la Paz por su mediación en conflictos regionales.
El líder ecuatoriano, Rafael Correa, es el que más acusa la caída de su popularidad con un descenso del 29% que le otorga una aprobación del 42%,
tras tres años de gobierno. Por debajo de estas cifras se sitúa el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, con un 38% de popularidad.
En Canadá, Stephen Harper se ha mantenido con la aprobación de uno de cada tres ciudadanos de ese país, logrando ahora 32% con niveles similares al peruano, Álan García, que obtiene un 29% de los apoyos.
La peor valorada de todo el continente es la mandataria argentina, Cristina Fernández de Kirchner
que apenas alcanza un 19% del apoyo popular, afectada por los problemas con el sector agrícola y más recientemente por su enfrentamiento con el Banco Central del país por la utilización de sus fondos para el pago de la deuda correspondiente a 2010.
0