La Rioja dispondrá en 2016 de 1.334 millones de euros, un 3,8% más

1.334,19 millones de euros. Es el dinero del que dispondrá La Rioja durante el próximo año 2016, un 3,89 más que este año. Unos presupuestos que para el presidente de La Rioja, José Ignacio Ceniceros, “reflejan la acción de un Gobierno abierto, al servicio de las personas y orientado a los resultados”. Además, señala que las cuentas de 2016 “responden a los objetivos de consolidar el crecimiento e impulsar la creación de empleo y garantizar la calidad de los servicios públicos y la mejora democrática”.

Coherente con el discurso de investidura

Ceniceros ha presentado hoy el proyecto de Ley de Presupuestos para 2016 y ha asegurado que es “coherente con el discurso de investidura, con la nueva estructura del Gobierno y los retos de comunidad”. En este sentido, ha indicado que las políticas de gasto responden a los objetivos de consolidar el crecimiento, impulsando la creación de empleo y el fortalecimiento empresarial, y “garantizar la calidad de los servicios públicos y la mejora democrática, buscando siempre el bienestar de las riojanas y los riojanos”.

Por ello, según ha resaltado, “el 70% del presupuesto, con un incremento del 2,5% respecto al año anterior, está destinado a las diferentes políticas que contribuyen a la cohesión de nuestra sociedad, con una herramienta, la Agenda para la Población”. Por su parte, el conjunto de políticas vinculadas a generar empleo y competitividad, “que obviamente también repercute en la cohesión social”, abarca el 24% de los recursos y el 6% restante se destina a gastos generales de funcionamiento e intereses de la deuda, ha manifestado.

Participación de los portavoces de los grupos parlamentarios

Por otra parte, Ceniceros ha destacado que, por primera vez, los portavoces de los grupos parlamentarios han podido participar en la fase interna de elaboración del proyecto de Ley, que recoge algunas de sus propuestas y sugerencias. “Incluye especialmente las aportaciones de Ciudadanos, con los que hemos llegado a un acuerdo respecto al impuesto de Patrimonio, el IRPF, la creación de un fondo para el fomento del trabajo autónomo y el incremento del personal sanitario y docente”, ha informado.

Pero además, el diálogo social permanente forjado en los últimos meses “nos permitirá presentar una estrategia integral de Empleo que implica a todos los departamentos de mi Gobierno”, a la que se dedicarán 280 millones de euros aproximadamente.

Entre las líneas de trabajo que incluirá dicha estrategia, Ceniceros ha destacado las políticas orientadas a la empleabilidad de las personas desempleadas, con un incremento cercano al 1% en programas de formación profesional reglada, formación continua y formación ocupacional, para incidir en la reducción de la tasa juvenil e intervenir sobre el paro estructural, sobre las personas mayores de 45 años, “el grupo de edad que más dificultades tiene para reingresar en el mercado de trabajo y que más preocupa a este Gobierno”, dice.

Fortalecimiento empresarial

En cuanto a las políticas de gasto encaminadas al fortalecimiento empresarial, ha recordado que “son nuestros sectores económicos, nuestras empresas, las que crean nuevos puestos de trabajo”, por lo que el objetivo del Ejecutivo riojano es incidir sobre la oferta de empleo con tres líneas de trabajo. En concreto, las tres líneas son la actividad empresarial y el comercio, a la que se destinan 17,06 millones de euros para atender a la internacionalización empresarial como factor de desarrollo; la innovación y la apuesta por la tecnología como elemento de dinamización, con 72,87 millones de euros -un 6,25% del gasto no financiero-, y la estrategia digital, a la que se destinan 26,51 millones de euros para que ciudadanos, empresas y administraciones hagan un uso intensivo de la tecnología al servicio de la mejora de la calidad de vida, del desarrollo personal y de la competitividad empresarial.

108 millones para dependencia y protección social

Por otra parte, el presidente del Ejecutivo riojano se ha detenido en el 70% del presupuesto destinado a la cohesión de nuestra sociedad, con una herramienta, la Agenda para la Población, y destacado que las políticas de dependencia y protección social recibirán 108,66 millones de euros, con un incremento del 3,54%, y el catálogo de prestaciones para fomentar la autonomía personal estará dotado con 25,44 millones de euros. En este apartado, “se incluyen las prestaciones de inserción laboral, las ayudas de protección a la infancia y aquellas dirigidas a ofrecer un alojamiento alternativo a las familias que han sufrido un desahucio y a combatir la pobreza energética”.

Asimismo, se destinarán 28,5 millones de euros a los conciertos de centros de mayores y 11,5 para plazas en centros de dependencia. Además se atenderán las necesidades de las familias y la infancia y se continuará con los programas de gestión de las situaciones de desprotección, prevención de la violencia de género, fomento de igualdad de oportunidades, mujeres embarazadas y atención a las personas en situaciones de especial vulnerabilidad y a los inmigrantes.

247 millones para Educación y 408 para Salud

Educación y Salud recibirán 247,82 y 408 millones de euros e incrementan sus partidas en un 5,16% y un 3,15%, respectivamente. En el caso del ámbito educativo este incremento, que se destinará fundamentalmente a atender los gastos del personal docente y la formación para el empleo, permitirá avanzar en un modelo educativo de calidad y mejorar la cohesión social y la convivencia ciudadana. Asimismo, se fortalecerá el aprendizaje del bilingüismo y se continuará prestando especial apoyo a los programas de atención a la diversidad.

En el caso de la sanidad, el aumento presupuestario está motivado por los gastos derivados de los tratamientos oncológicos y de la hepatitis C, así como el incremento salarial del personal sanitario. En este caso, el objetivo pasa por ofrecer una asistencia sanitaria de calidad, universal y gratuita.

Previsión del 0,03% de déficit

Por su parte, el consejero de Administración Pública y Hacienda, Alfonso Domínguez, ha destacado que el presupuesto se ha elaborado, por primera vez, en equilibrio, es decir, con una previsión del 0,03% de déficit, aunque el objetivo establecido es del -0,3%; y ha añadido que se han teniendo en cuenta unas previsiones de crecimiento “muy prudentes, el 2,7% a pesar de que sabemos que hay consenso en que La Rioja crecerá mucho más”. También ha indicado que durante 2016 La Rioja comenzará a reducir su endeudamiento neto, “lo cual es muy importante para ganar los retos de futuro en cuanto a sostenibilidad de las cuentas públicas”.

Asimismo, y en relación con la política fiscal, ha reiterado que el Partido Popular es partidario de la reducción de impuestos, pero ha indicado que para el actual Ejecutivo riojano “es un principio fundamental” contar con el consenso de la mayor parte de las fuerzas parlamentarias, que han presentado propuestas sobre los gastos pero también sobre los ingresos.

En este sentido, ha explicado que se han atendido las demandas planteadas por los grupos parlamentarios y especialmente por Ciudadanos, formación con la que se ha llegado a un acuerdo para establecer una moratoria en la eliminación total del Impuesto de Patrimonio durante 2016, periodo en el que un grupo de trabajo, formado por los grupos parlamentarios Popular y Ciudadanos, estudiará la estructura, impacto y recaudación de este impuesto para que “el Parlamento decida si se elimina”.

Reducción del tramo autonómico del IRPF

Del mismo modo, ha señalado que los presupuestos contemplan una nueva reducción del tramo autonómico del IRPF destinada específicamente a las familias con menos ingresos y a las clases medias y un incremento para las rentas superiores a 120.000 euros.

Según ha explicado, se ampliará a siete el número de tramos de la escala actual, que son 5, para adecuarlos a la verdadera capacidad económica de los contribuyentes y que éstos sean gravados de forma más equitativa. Así, “se reduce 0,5 puntos el tipo aplicable en cada uno de los tramos para rentas de entre 20.200 y 50.000 euros, con una rebaja global de 1,5 puntos del IRPF”, y se crea un séptimo tramo aplicable a contribuyentes con rentas superiores a 120.000 euros, que ven incrementado el tipo en 2 puntos.

Por último, Alfonso Domínguez ha indicado que se congelan las tasas y el canon de saneamiento, se elimina el impuesto de grandes superficies y se mantienen las deducciones impositivas que se venían aplicando en los últimos años.